Las alertas se disparaban en el mes de marzo cuando Lely Céspedes (50 años) saltaba de nuevo a la actualidad tras un tiempo fuera de los medios. La exmujer de Ernesto Neyra (59) acudía al plató de Sálvame para denunciar su desesperada situación económica. La malagueña comunicaba estar en la ruina y pedía desesperadamente formar parte de la actual edición de Supervivientes para poder hacer frente a sus pagos.
Finalmente, su situación se ha agravado y la exazafata del Telecupón ha tenido que abandonar su casa al no poder hacer frente a los 800 euros de alquiler mensuales que debía abonar por ella. Lely ha generado ya una deuda de "unos 8.000 -9.000 euros", al no poder pagar el alquiler, según ella misma ha contado, ya que no quería trasladarse a la vivienda de su progenitora hasta que esta no tuviera la vacuna de la Covid-19 inoculada.
A partir de ahora, Conchi, su madre, tendrá que hacer un esfuerzo sobrehumano para convivir con la exmodelo, sus tres hijos, más cuatro perros, dos de Lely y dos propios en un piso de 60 metros cuadrados. Los ingresos con los que cuenta la familia actualmente son los 500 euros de pensión que percibe Conchi más otros tantos que le ingresa Ernesto Neyra a Lely en concepto de manutención de sus hijos, aunque también ha recordado que el bailarín ha contraído con ella una deuda de 20.000 euros.
La última vez que acudió al programa de Jorge Javier Vázquez (50) ya quedó al descubierto que, a pesar de residir en una urbanización nada modesta y conducir un coche de alta gama, la exmodelo, madre de cuatro hijos -tres de ellos del bailarín-, tenía problemas para llegar a final de mes.
Y precisamente el que fuera marido de la fallecida Carmina Ordóñez no ayuda a solucionar las terribles circunstancias de la malagueña ya que esta confesó que se había visto obligada a denunciar al padre de sus hijos por no pagar la manutención. "Quiero trabajar y quiero sacar a mi familia adelante. Soy una superviviente y lo voy a demostrar", afirmaba, a pesar de haber expuesto previamente sus deudas, motivadas por la dificultad de conseguir un empleo a su edad en nuestro país.
Otra de las causas que podría haber contribuido a su delicada situación, podría ser su asiduidad a acudir al bingo, donde suele desembolsar cantidades entre 200 y 300 euros. "Es un problema y no lo ves. El juego si no es diversión es un problema", le decía aquel día María Patiño (49). La invitada se mostraba reacia a reconocer este hábito pero el polígrafo despejó la duda.
Lely también se tuvo que defender en su visita al programa de ciertas acusaciones de hurto, algo que supuestamente sucedió en un supermercado. La miss lo negó categóricamente, aunque dejó claro que si tuviera que robar para darle de comer a sus hijos, no lo dudaría. "Ahora mismo vivo de amigas que me ayudan, tápers de mi madre..." incluso llegó a mencionar que se ve obligada a acudir a los bancos de alimentos para poder comer cada día.
Una de las confesiones más impactantes de la exazafata en esta intervención televisiva estuvo relacionada con su etapa en el Telecupón. Lely desveló que Vicente Patuel, su jefe y marido de Carmen Sevilla, tenía fijación con ella: "No tuve una relación carnal con él. Para mí fue un infierno porque se obsesionó conmigo". La que fuera su subordinada comentó que el directivo le alquiló un piso y le pedía que se mantuviera en él encerrada todo el día. A esto añadió la descripción detallada de una serie de peticiones que, siempre según ella, le hacía Patuel. "Me pedía que embotellara mis orines para bebérselos", revelaba la exmodelo por lo que explicaba que llegaba a ingresarle una cantidad mensual de 200.000 pesetas.
[Más información: Lely Céspedes asegura que Vicente Patuel, marido de Carmen Sevilla, le daba dinero a cambio de vejarla]