La primera gran noche de Doncic con los Lakers: una exhibición para acabar con la maldición en Denver

Ocho partidos llevaban los Lakers sin ganar en el pabellón de los Denver Nuggets. Casi tres años sin meter mano en la cancha de una de las mejores Franquicias de los últimos tiempos. Sin embargo, los angelinos acabaron por fin con la mala racha gracias a la figura de Luka Doncic.

El esloveno vivió su primera gran noche con la elástica de los Lakers. Después de tres partidos con luces y sombras llegó el gran día del ex de los Mavericks. Una exhibición portentosa que recordó a sus mejores tiempos y que silenció por completo al Ball Arena.

Nadie pudo parar a Doncic. Anotó 32 puntos, recogió 10 rebotes y repartió 7 asistencias en 31 minutos de juego. Se mantuvo cerca del 50% en tiros de campo y guió a los suyos hacia la cuarta plaza en la Conferencia Oeste y dejándoles a tiro la tercera plaza precisamente en favor de los Nuggets.

El base esloveno se salió especialmente en el primer cuarto. Anotó 16 puntos y fue el artífice de que los Lakers comenzaran a ganar terreno desde el inicio. Nicola Jokic, el mejor jugador de la NBA, volvió a firmar un triple doble (12+13+10), pero no pudo evitar la derrota de los Nuggets después de nueve triunfos consecutivos.

"Finalmente me siento yo mismo", aseguró Doncic tras reconocer hace unos días que se sentía aún "oxidado" y que necesitaba tiempo para recuperar su mejor forma física. "Nuestro objetivo es ganar el campeonato. Ese es nuestro único objetivo. Y creo que tenemos el equipo para eso", añadió. 

Reuters

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Conexión con LeBron

Luka Doncic fue el héroe de los Lakers, pero estuvo secundado también con una notable versión de LeBron James. El legendario alero de la NBA anotó 25 puntos y tuvo una gran conexión con su nuevo compañero.

Que Lebron James y Doncic se entendieran cada vez mejor era cuestión de tiempo... y de partidos. De hecho, la victoria de los Lakers dejó el primer 'alley up' de los muchos que nos esperan entre Doncic y Lebron James. 

Ambos tienen que ir de la mano para devolver a los Lakers a lo más alto de la NBA. De ellos dependerá que la franquicia angelina pueda llevarse el anillo. Están bien rodeados y su sinergia cada día es mejor. "Yo soy un receptor nato y él es un quarterback nato, así que encaja perfectamente", dino LeBron hace unos días sobre Doncic.