McLaren vuelve a dar esperanzas a sus seguidores después de que este lunes su jefe deportivo, Eric Boullier, haya reconocido que el monoplaza que se vio en los primeros test en Montmeló era "de prueba", al tiempo que emplazó al primer fin de semana del campeonato, el GP de Australia, para ver el verdadero potencial del MCL32.
"[En Montmeló] tuvimos una versión de prueba, por lo que creemos que somos de los pocos equipos del paddock que irá a Australia con, no diría una especificación B, pero sí un coche que estará muy cambiado", aseguraba Boullier este lunes a 'Motorsport'.
Eso sí, para Boullier las sesiones de los viernes van a resultar cruciales para avanzar todo lo que no han podido durante la primera semana de entrenamientos, donde los problemas mecánicos impidieron ver la versión definitiva del coche. "El miércoles tuvimos dos o tres problemas en el coche, los típicos de los primeros días, pero deberían haber ocurrido el primer día, no el tercero. No ha sido un buen test, no rodamos lo que queríamos".
"Fui mejorando lo largo de la semana y para la próxima semana estaremos en otra situación y en Australia en otra aún mejor", señalaba por su parte Fernando Alonso tras los test de Montmeló. "El chasis va bien, creo en la misma teoría de antes. El chasis tiene buena base. He podido sentir buen agarre en las curvas y, como todos los equipos, lo que estamos probando en Barcelona no va ser lo mismo que en Australia" aseguraba el español.