Ilia Topuria, junto a su cinturón de campeón del peso pluma de la UFC

Ilia Topuria, junto a su cinturón de campeón del peso pluma de la UFC EFE

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Los inicios desconocidos de Ilia Topuria en España: "Con 16 años dejó el colegio para entrenar las 24 horas en el gimnasio"

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Ilia Topuria, nacido en Halle, Alemania, en 1997, ha emergido como uno de los nombres más destacados de la UFC, aunque su historia de sacrificio y lucha comenzó mucho antes de que el mundo escuchara hablar de él.

A sus 15 años, Ilia llegó a España junto a su familia, después de vivir en Alemania y Georgia, de donde son originarios sus padres. La ciudad de Alicante fue el punto de partida de un largo y arduo camino que llevó a Topuria a convertirse en campeón mundial. Sin embargo, los inicios fueron complicados, con decisiones difíciles y un empeño absoluto en alcanzar su sueño de ser el mejor.

Instalado en Alicante junto a su familia, Ilia encontró en el Climent Club un hogar deportivo. Este gimnasio, dirigido por Jorge y Agustín Climent, fue el escenario donde comenzó a entrenar en serio junto a su hermano Aleksandre, apenas un año mayor.

La madre de los Topuria, que trabajaba como cuidadora, los llevó al gimnasio después de hablar con un alumno del Climent Club que le explicó el tipo de entrenamiento que realizaban. Al llegar al gimnasio, Ilia y su hermano quedaron cautivados por el ambiente de entrenamiento y el arte del jiu-jitsu.

Su dedicación fue tal que, apenas un año después, decidieron dejar el colegio para dedicarse al entrenamiento de tiempo completo. Aunque la decisión fue difícil de aceptar para sus padres, los hermanos Climent explicaron que, si los chicos estaban comprometidos al cien por ciento, podrían lograr algo significativo en el mundo de las artes marciales. Con el compromiso de mantener informados a sus padres sobre el tiempo que Ilia y Ablex pasaban en el gimnasio, los jóvenes Topuria nunca faltaron a sus entrenamientos.

Las primeras peleas

Los primeros combates de Ilia Topuria fueron en competiciones amateur en España. A sus 16 años, ya debutaba en combates en ciudades como Barcelona, donde, aunque los nervios estaban a flor de piel, él y su hermano consiguieron destacarse desde el inicio.

En uno de sus primeros enfrentamientos, Ilia dejó claro su potencial al finalizar a su rival en tan solo 30 segundos, demostrando un dominio que lo caracterizaría en el futuro. Estos combates, aunque rudimentarios, fueron la base de su preparación y le dieron la confianza para competir en escenarios cada vez mayores.

Viajar por Europa para participar en competiciones amateur representaba un gasto significativo para Ilia y su familia. No obstante, los hermanos Climent se las arreglaban para llevar a sus alumnos a torneos locales.

Aunque el reconocimiento y los recursos eran limitados en esa etapa, Ilia continuó ganando y preparándose para alcanzar las ligas mayores.

Ascenso profesional

En 2015, con solo 18 años, Topuria hizo su debut profesional en la MMA, ganando su primer combate contra Francisco Javier Asprilla mediante una sumisión en el primer round. Este triunfo marcó el inicio de una carrera que lo llevaría a conquistar la cima de la UFC.

A lo largo de los años, Topuria ha demostrado un nivel de habilidad y determinación que pocos pueden igualar, lo que lo ha llevado a ser considerado uno de los luchadores más temidos en su categoría.

En febrero de este 2024, Ilia ha conseguido su título mundial de la UFC tras vencer a Alexander Volkanovski y romper su reinado de más de 1.500 días en la división. Más recientemente dejó en el camino a Max Holloway, uno de los luchadores más respetados de la liga, conocido por su resistencia. Topuria le arrebató el récord de nunca haber sido noqueado en un combate oficial, consolidando así su posición en la cima de la MMA.

Nuevos desafíos

Con su cinturón mundial ya en mano, Topuria está decidido a continuar su dominio en la UFC. La organización, con el respaldo del propio Dana White, está en conversaciones para llevar el próximo combate de Ilia a España, algo que sería histórico para el deporte en el país.

Topuria ha manifestado su deseo de pelear en el estadio Santiago Bernabéu en Madrid, un lugar icónico que, según el luchador, sería perfecto para el evento. Sin embargo, la UFC ha mostrado preferencia por recintos más cerrados como el WiZink Center, argumentando que estos garantizan una atmósfera óptima para el espectáculo de la MMA.

Mientras tanto, Topuria sigue entrenando con un objetivo claro: no solo defender su título, sino consolidarse como uno de los mejores luchadores del año en todas las categorías.

Entre sus planes también figura un futuro combate con Islam Makhachev, campeón en la categoría de peso ligero, aunque esta pelea podría demorar hasta 2025. La UFC busca darle un gran combate, y la opción de enfrentar de nuevo a Alexander Volkanovski parece la más probable.

Javi Climent, Ilia y Aleksandre Topuria y Agustín y Jorge Climent, tras la victoria ante Holloway

Javi Climent, Ilia y Aleksandre Topuria y Agustín y Jorge Climent, tras la victoria ante Holloway

España y la UFC

El sueño de Topuria y su equipo parece estar más cerca que nunca de hacerse realidad. La negativa del Ayuntamiento de Barcelona de respaldar institucionalmente un evento de la UFC por la naturaleza violenta de las MMA deja prácticamente a Madrid como la única opción viable.

La Comunidad de Madrid y el propio Ilia han promovido la realización de este evento en la capital, que, de lograrse, sería un hito para los fanáticos de las artes marciales mixtas en España.

La UFC ya está considerando las fechas y el lugar para el combate, y junio de 2025 parece ser el mes más probable, una vez que finalice la temporada de fútbol. A medida que los detalles se afinan, la expectativa en torno a Ilia Topuria y su próximo combate crece, con miles de seguidores esperando ver a su campeón pelear en casa.

La historia de Ilia Topuria es la de un luchador que, desde temprana edad, dejó todo por perseguir su sueño. Hoy, convertido en campeón mundial y figura de la UFC, sigue avanzando en su camino, con el compromiso y la pasión que lo han llevado hasta donde está y que prometen llevarlo aún más lejos.