Canadá se cobra su venganza ante Donald Trump en el hielo: "No puedes arrebatarnos ni nuestro país ni nuestro deporte"

Canadá y Estados Unidos se vieron las caras en la gran final del torneo 4 Naciones de hockey sobre hielo. Un partido ya de por sí 'caliente' que en esta ocasión estuvo cargado de una mayor tensión por las últimas proclamas anexionistas del presidente de EE. UU., Donald Trump.

Canadá encontró en este evento deportivo que se había convertido en mucho más que un mero partido de hockey sobre hielo en el lugar perfecto para su venganza. Los canadienses vencieron por 2-3 a Estados Unidos y aprovecharon para cobrarse muchas facturas.

Antes del partido, Trump hizo gala de su estilo. Aunque no acudió a Boston, donde se disputó la final, a pesar de que el director técnico de la selección estadounidense le pidió su asistencia, el líder republicano llamó por teléfono a sus jugadores para animarles.

"Esta mañana llamaré a nuestro GRAN equipo estadounidense de hockey sobre hielo para espolearles hacia la victoria esta noche contra Canadá, que con IMPUESTOS MUCHO MENORES Y MAYOR SEGURIDAD, algún día, quizás pronto, se convertirá en nuestro querido y muy importante 51 estado", dijo el presidente de los Estados Unidos en sus redes sociales.

Sin embargo, la actitud fanfarrona le salió mal a Donald Trump. Canadá doblegó en la prórroga a Estados Unidos y el presidente estadounidense tuvo que bajar la cabeza ante la respuesta del primer ministro canadiense, Justin Trudeau.

"No puedes arrebatarnos ni nuestro país ni nuestro deporte", aseveró Trudeau también en las redes sociales inmediatamente después del pitido final del partido.

Un partido cargado de mensajes

El mensaje de Trudeau no fue el único de la noche. La artista canadiense Chantal Kreviazuk, encargada de cantar el himno canadiense, 'O Canada', antes del partido en el TD Garden de Boston, decidió cambiar la letra en respuesta a las amenazas de anexión de Trump.

Kreviazuk, que también acentuó la letra del himno en aquellos pasajes en los que aparece la palabra "libertad" entre los abucheos de algunos hinchas estadounidenses, cambió una frase para destacar que solo los canadienses tienen el control del país.

El duelo estuvo cargado también de tensión y emoción en lo deportivo. Por supuesto, los jugadores no fueron ajenos a la situación extradeportiva que se había generado en las últimas horas y se vio un partido de lo más igualado sobre el hielo.

Fue en el tiempo extra cuando el portero canadiense, Jordan Binnington, se convirtió en el héroe del partido al detener cuatro claras ocasiones de gol de los estadounidenses lo que dio la oportunidad a su compañero Connor McDavid a marcar el gol de oro y silenciar a los seguidores estadounidenses en el TD Garden.