Por primera vez desde 2004, cuando iniciaron su legendaria rivalidad en el torneo de Miami, Rafael Nadal y Roger Federer se enfrentarán antes de los cuartos de final de un torneo, consecuencia del puesto en la clasificación (seis y 10) que ocupan cada uno ahora mismo. Este miércoles, en octavos de final del Masters 1000 de Indian Wells, español y suizo escribirán el capítulo 36 del clásico que cambió la historia del tenis para siempre. Lo harán, además, meses después de la épica final que disputaron en el Abierto de Australia, donde Federer levantó su Grand Slam número 18.
“El partido de Australia me ayudará un poco, pero todavía estoy en mi proceso de regreso”, avisó el número 10 del mundo tras imponerse al estadounidense Johnson. “Lo intentaré enfocar como otra oportunidad de sustentar mi nivel para el resto de la temporada”, insistió Federer, que concibe un encuentro distinto al que ambos jugaron hace unos meses en Melbourne.
“Es diferente. Nos va a costar más encontrar nuestros tiros ganadores a las esquinas. Si juegas en rondas iniciales, sueles ver que los mejores no buscan tanto las líneas. Te das un cierto margen, así que creo que este partido será algo diferente”, prosiguió el suizo. “Independientemente de lo que pasara en Australia, trataré de salir suelto de nuevo. Es muy importante”, reconoció. “Es un encuentro al mejor de tres sets. Por eso, va a ser un sprint y no un maratón como en Melbourne”, afirmó. “Me alegro de sentirme fuerte de nuevo, porque en Dubái me encontraba bastante cansado. Creo que si soy capaz de moverme bien voy a tener mi opción ante Rafa”, auguró.
“Es duro, pero no ocurre cada semana. Lo único que podemos hacer para evitarlo es estar más arriba en el ránking”, se arrancó Nadal sobre el duelo contra el suizo. “Federer tiene el talento de hacer que las cosas difíciles parezcan fáciles”, siguió el español, vencedor de Fernando Verdasco en la tercera ronda. “Sabe pegar muy pronto a la pelota, conectar el saque y el primer golpe. Logra muchos tiros ganadores con estos dos primeros golpes”, continuó el mallorquín sobre su oponente.
“Es capaz de tomar la bola desde dentro y luego irse a la red muy rápido. Si le juegas una pelota corta, sabes que va a golpear desde dentro, que va a buscar el ganador y que vas a estar en problemas”, añadió el número seis mundial. “Su revés en Melbourne estuvo a uno de los mejores niveles de siempre en nuestros partidos”, se despidió el campeón de 14 grandes, que por primera vez lo pasó muy mal con ese tiro de su oponente.
“Es un jugador con muchas posibilidades”, dijo Federer, radiografiando a su contrario. “Puede jugar dentro y fuera de la pista. Se ha convertido en un tenista con las dos opciones y no tenemos muchos jugadores en el circuito que puedan hacer eso”, recalcó. “Él tiene un Plan A o un Plan B, dependiendo de cómo quiera empezar el partido. O también puede variar, en función si está en el lado del iguales o en la zona de la ventaja. Es muy complicado hacerlo. Puedo decirlo porque he intentado jugar desde atrás y es un juego totalmente diferente”.
Así, y una vez más, el mundo se volverá a parar esta noche: Nadal y Federer se miden en los octavos de final de Indian Wells. Más pronto que casi nunca, igual de intenso que casi siempre.