Rafael Nadal es uno de los mejores tenistas de la historia, el actual número uno del mundo y, sin duda, un deportista universal. Pero, también, una persona normal como cualquier otra. O, al menos, esa es una de las cualidades que siempre han definido al manacorense: una cercanía que se le sale del pecho y que, entre sus muchos valores positivos, le honra.

Nadal volvió a dar muestras de esa simpatía y naturalidad innatas en el Masters 1.000 de París. Un equipo de Canal + Deportes Francia decidió mostrar el día a día del español durante el torneo, captando una escena cuanto menos anecdótica. Se produjo el pasado miércoles 1 de noviembre, mientras el jugador balear recorría las instalaciones de una competición de la que tuvo que retirarse antes de los cuartos de final (ver el vídeo a partir del segundo 53).

"Buenos días, señor, ¿tiene su acreditación?", le preguntó uno de los vigilantes de seguridad de las pistas, sin darse cuenta, aparentemente, de a quién tenía enfrente. "No la tengo aquí", respondió Nadal justo antes de enfrentarse a una cuestión aún más sorprendente que la primera: "¿Quién es usted?".

"Rafael Nadal", respondió el tenista a su interlocutor, que no tardó en apartarse y cederle el paso a las escaleras que le daban acceso al lugar donde tenía que entrenarse. A buen seguro que la situación dejó más atónito al miembro de la organización que no supo reconocer a Nadal que al propio Rafael.

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