Edi debuge..., 2001

Como no podía ser de otra forma, la expectación está servida con Rafael Agredano, y es que cada nueva exposición viene seguida de un elemento sorpresa que él dosifica con inteligencia. Si antes fueron los pintorescos sucesos de Aviñón narrados por un marinero y luego las fotográficas ilusiones de una ópera brillante, ahora los acontecimientos se suceden en una red infinita de voces fragmentadas. Sin abandonar la pintura, que figura como una entelequia en la mayoría de sus actuaciones, da un giro más a su trabajo haciendo piruetas en el espacio de las nuevas tecnologías. De esta forma, bajo el título Je t"e maile...moi non plus, el artista se mueve por las telarañas de los mensajes infográficos poniendo voz a las imágenes y dando luz a las palabras. Con ello, al hilo del mundo de la información y su lectura artística, pone en cuestión conceptos y formas, y agudiza, más si cabe, su ya ingenioso sentido del humor, algo que a menudo le falta al arte de nuestros días. Un trabajo para no perder de vista.