Colour Studies, 1973-76

Aunque se le ha incluido en algunas colectivas importantes (Interfunktionen, Fundación Joan Miró, 2004; Kunstmuseum Wolfsburg, Fundación Juan March, 2005; Colección Herbert, MACBA, 2006) sólo la galería Estiarte ha reivindicado en España la importancia de Jan Dibbets (Weert, Holanda, 1941), que antes sólo había hecho una instalación en el Espai Poblenou (1990) y una muestra de fotografías en el Palacete del Embarcadero (2004). Dibbets ha mantenido su prestigio, y ha seguido trabajando con importantes galerías internacionales, pero es cierto que ha explotado quizá un poco más de la cuenta sus hallazgos iniciales, como demuestran las tiradas que ha autorizado en los últimos años de viejas fotografías. Es el caso de los Colour studies, realizados entre 1973 y 1976, y editados (40 ejemplares) este mismo año por la galería Alan Cristea de Londres, que ha producido las ediciones de las series Water, Leaves y Stones, todas sobre originales de los 70. Estiarte trae la serie completa (diez obras) que resulta tremendamente actual. La incidencia de la luz solar sobre brillantes carrocerías de coches crea matices cromáticos y líneas inciertas, afines a la "fotografía abstracta". Pero, de cerca, se vislumbran reflejos de masas vegetales o de arquitecturas que pueden remitir a los horizontes que protagonizaron obras anteriores.

En mi opinión, el trabajo más interesante de Dibbets es ése, el que en 1969-70 desarrolla el novedoso formato de la "secuencia fotográfica". En esa época, la fotografía adquiere en manos de los artistas conceptuales nuevas dimensiones y nuevos usos: frente a su utilización como medio de representación, se emplea para cuestionar la percepción de lo real, introduciendo mecanismos narrativos casi inéditos. La secuencia es uno de esos mecanismos que, en Dibbets, se aplica a la relación entre mirada y paisaje, mirada y cambios de luz, y a la construcción espacial. El holandés es pionero en la "expansión" de la imagen fotográfica en el espacio expositivo por medio del montaje creativo de las seriaciones y con ayuda del dibujo, que interactúa con las imágenes. Estos elementos -fotografía, dibujo, arquitectura real- son los componentes básicos de la segunda de las series que se presentan ahora, Perspective Collection, a los que hay que añadir otra constante en el trabajo de Dibbets: el interés por el espacio del estudio (ha fotografiado los de Zadkine y Röckriem) y por las creaciones de otros artistas. La serie, compuesta por diez obras (casi agotada: traen las cuatro que quedan), es de 2004, y está basada en las Perspective Corrections de 1969: en el suelo, o en la pared, el artista dibuja o traza (hoy) con un cordel trapecios que, vistos a través del objetivo de la cámara, parecen exactamente paralelepípedos que se "levantaban" ópticamente de la superficie de base. La cámara miente e inventa, venía a decir entonces; el espíritu de las nuevas perspectivas es más lúdico: un diálogo con las obras de pintores y escultores minimalistas de su propia colección. Judd, LeWitt, Ryman, Mangold y André, los popes de la pureza y la verdad, absolutamente desvirtuados.