Image: Barceló pinta el cartel del funeral del toreo en Barcelona

Image: Barceló pinta el cartel del funeral del toreo en Barcelona

Arte

Barceló pinta el cartel del funeral del toreo en Barcelona

El pintor mallorquín se suma así a la última corrida en suelo catalán antes de la prohibición, en la que José Tomás. oficiará como máxima figura.

16 septiembre, 2011 02:00

Cartel taurino de Miquel Barceló.

Miquel Barceló se ha sumado al funeral de la tauromaquia que se oficiará el próximo 25 de septiembre en la Monumental de Barcelona. Esa tarde se lidiará la última corrida en suelo catalán. Los tres espadas que compondrán la terna ese triste domingo para los taurinos serán Juan Mora, José Tomás y Serafín Marín. Y los toros bravos los pondrá la ganadería de El Pilar. El cartel en el que figurarán los tres diestros ha sido pintado por el artista mallorquín y a partir de mañana empapelará las paredes de la ciudad.

Sólo lo que parece un milagro impedirá que se consume el cerrojazo al toreo en Cataluña. Una Iniciativa Legislativa Popular y un recurso ante el Tribunal Constitucional son los instrumentos legales que los taurinos han esgrimido para evitar el fin de su afición (de su pasión). Pero las esperanzas entre los aficionados a la fiesta son pocas.

José Tomás, en entredicho tras su reaparición, sin terminar de cuajar ningún triunfo rotundo hasta la fecha, llega de nuevo a una de sus plazas predilectas, para otra ocasión muy especial. Allí, después de pasarse cinco años alejado voluntariamente del toreo, retornó a los ruedos en 2007. Por cierto, ese cartel también lo pintó Barceló. Allí indultó al toro Idílico en 2008. Y allí también se encerró con seis morlacos en un festejo cuya recaudación donó a una asociación de toreros retirados con pocos recursos económicos.

En el cartel, Barceló coloca en un primer plano a un toro de perfil y de fondo una plaza armada con circunferencias garabateadas, que remite a la circularidad constante del baile simultáneo que delinean toro y torero. Esa es la circularidad perfecta que Barceló le hizo descubrir al propio Luis Francisco Esplá una noche de champán y palabras en Nimes, durante una conversación en la que el pintor confiesa su vinculación emocional y estética con el toreo, y que quedó registrada en el libro Sentimiento del toreo, editado por el poeta Carlos Marzal.