Sotheby's desempolva La tauromaquia de Goya
Temeridad de Martincho en la plaza de Madrid
Los próximos días 21 y 22 de marzo Sotheby's expondrá en su sede de Madrid una serie completa de los grabados de Goya, recientemente descubierta en una biblioteca francesa, que subastará el 4 de abril en Londres.
Con un precio estimado que oscila entre las 300 mil y las 500 mil libras (345 mil-575 mil euros), las impresiones son prácticamente ejemplos impecables de la primera y única edición contemporánea que se imprimió para Goya entre 1815-1816. Los grabados viajarían desde Madrid hasta el castillo de Montigny, a 100 kilómetros de París, en 1831, donde permanecieron olvidadas por las generaciones sucesivas al dueño original.
Goya pintó La tauromaquia al final de su vida, justo después de la Guerra de la Independencia, en un momento en el que ya no contaba con sus grandes mecenas como Carlos III y Carlos IV y terminó por exiliarse en Burdeos, donde moriría en 1828. La obra completa tiene tres partes: una dedicada a la parte histórica de la fiesta de los toros en España, de la que Goya era gran aficionado, con láminas como Carlos V lanceando un toro en la plaza de Valladolid o El Cid Campeador lanceando otro toro; una segunda en la que muestra a las figuras de las dos escuelas taurinas predominantes en la época (la navarro-aragonesa y la andaluza) y una tercera en la que representa varios lances como el salto a la garrocha, las banderillas de fuego o la suerte de matar.
Séverine Nackers, responsable de obra gráfica de Sotheby's Europa asegura que "encontrar un conjunto completo de estampas taurinas de Goya con una procedencia histórica tan compleja es un descubrimiento único en la vida", por lo que esperan una respuesta entusiasta de los coleccionistas.
Locura de Martincho en la plaza de Madrid
Las huellas de los grabados se descubrieron cuando los nuevos herederos, faltos de liquidez como muchos propietarios de castillos franceses, inspeccionaban la propiedad de la familia y sacaban un gran volumen indescifrable de la parte posterior de una estantería de la biblioteca, llena de espléndidas encuadernaciones. En un primer vistazo, el extraño libro decimonónico reveló 90 litografías de vivos colores que llevaban la firma H. Bellangé pegada en sus páginas. Un vistazo más en detalle reveló un descubrimiento sorprendente, otra serie de estampados, esta vez monocromos, que fueron inmediatamente reconocidos como obras salidas de la mano de Goya. La huella del maestro español ha permanecido intacta en el interior del álbum ya que cada una de ellas estaba cuidadosamente inclinada, con toques de pegamento en las cuatro esquinas, lateralmente en las páginas, operación que parece haber sido llevada a cabo en la década de 1840.El propietario original de este conjunto de esta serie de La tauromaquia fue el conocido marqués de Laval, político y diplomático francés que fue nombrado embajador en la corte de Madrid en 1814. Su estancia en España en los convulsos años del reinado de Fernando VII coincidió con la época en la que Goya emprendió la realización de estos grabados tras terminar sus pinturas heroicas de los días 2 y 3 de mayo de 1808. Se desconoce si la serie fue adquirida por el embajador o fue un regalo del rey español, como un retrato de Fernando VII que también forma parte del patrimonio familiar.
Volviendo a la subasta, Sotheby's espera que la venta genere una gran expectación entre los coleccionistas, y que se supere el récord de venta de grabados de Goya, marca que en la actualidad posee otra serie de La tauromaquia subastada en 2013 en Nueva York por 1,7 millones de euros.