Beat Streuli: Sydney

Mapping the City es una colectiva que explora la relación entre los artistas plásticos y la ciudad. El espacio urbano de nuevo a debate.

La exposición se enmarca en un ciclo de exposiciones que el Stedelijk de ámsterdam ha venido programando últimamente en su espacio anexo al puerto de ámsterdam, un lugar provisional a la espera de la apertura del nuevo Stedelijk, el año próximo. Muchos recordarán la muestra titulada "Mapping the Studio" organizada este verano, que giraba en torno a la relación del artista con su espacio de trabajo a partir de la pieza homónima de Bruce Nauman. Este ciclo de exposiciones se viene realizando con piezas pertenecientes a la colección del Stedelijk, una de las más potentes de Europa, y con préstamos procedentes de otras importantes colecciones internacionales.

La exposición está planteada desde dos puntos de partida. Uno es el del "flâneur", en sintonía con la descripción de Baudelaire, que escruta la ciudad y que es origen y también producto de la modernidad. El otro es el concepto de deriva entendido desde el prisma de Debord, un divagar por la ciudad, un dejarse llevar, y los encuentros que ésto propicia. Escritos con un siglo de diferencia, ambos ensayos se erigen en textos claves para la representación de la ciudad y de la relación que establecemos con ella.

Desde los años sesenta, la ciudad se convirtió en soporte para muchos artistas. Otro de los momentos claves de esta exposición es la obra de Stanley Brouwn "This Way Brouwn". En ella, el artista pedía aleatoriamente a los transeúntes de la ciudad que le indicaran el camino desde un punto a otro. Estos caminos serían llamados "This way Brouwn". Similares a estos trabajos son otras aproximaciones al entorno cotidiano urbano. La idea de pasear es central en obras de artistas como Douglas Huebler o Martha Rosler, Dan Graham o Bill Owens, estos dos últimos trabajando sobre temas centrados en la relación centro-periferia, la producción en masa, lo privado y lo público, el contraste de clases, etc. No podemos obviar tampoco la fuerte presencia de fotógrafos "clásico" tratando el tema central, como William Klein que ya en los cincuenta adquirió buena mano a la hora de capturar comportamientos y actitudes de la gente en la ciudad, fundamentalmente Nueva York.

La exposición avanza a lo largo de las décadas y hace una parada en un artista fundamental, Francis Alÿs, en cuya obra se condensan las particularidades de los dos textos citados más arriba. El escenario de Alÿs es la ciudad que pasea, las manzanas que escruta alrededor de su estudio en el centro de Ciudad de México. Alÿs ha creado un interesantísimo corpus de trabajo que toma cuerpo en dibujos, fotografías, anotaciones, mapas y objetos y que constituye uno de los ejes de esta exposición.

No podemos olvidar tampoco los muy interesantes trabajos en vídeo presentados en la muestra. Destaca, sobre todo, la gran obra de Sarah Morris, "Miami", un retrato de lo que se ha dado en llamar la "capital del sol y el divertimento de los Estados Unidos".También está presente esa sensación de extrañamiento que se desprende del paso por la ciudad, algo que se puede percibir en otra gran pieza, "Electric Earth" de Doug Aitken.