Image: Bruce Nauman

Image: Bruce Nauman

Arte internacional

Bruce Nauman

12 julio, 2007 02:00

www.castellodirivoli.it

Esta exposición -organizada por el Castello junto con otras instituciones californianas- explora la primera época del artista vivo más influyente de la segunda mitad de siglo

La exposición se centra en la producción más temprana del artista, que en 1964 viajó desde Forth Worth, Texas, hasta la Universidad UC Davis, al norte del estado de California, para estudiar arte. Los cinco años que cubre la muestra, hasta finales de la década de los sesenta, son años vitales para el devenir del arte, que ya había visto como una serie de artistas desafiaban las convenciones del Pop y el Minimal y progresaban hacia un tipo de creación más centrada en los procesos que dan lugar a la obra o, mejor dicho, cómo se integran esos mismos procesos en la propia obra. Bruce Nauman sienta aquí las bases de su trabajo posterior y también de buena parte de los modos de percibir y entender lo que es una obra de arte.

Son las fotografías, esculturas, instalaciones y performances de Bruce Nauman, los primeros ejemplos del postminimalismo en contraste con los acabados relucientes de sus predecesores minimalistas. Hay una reflexión sobre la consideración de la vida y el entorno cotidianos, siempre en un contexto en el que la escultura y la performance caminan de la mano, ésta derivada de aquélla. De esta forma, Bruce Nauman valora el espacio a partir de la experiencia de su propio cuerpo y de la relación entre éste, los objetos y el lugar en que se enmarcan. Muchas de las inquietudes futuras de Nauman se gestan durante estos años: el colapso y el fallo perceptivo, el espacio negativo, la ausencia de artificio…En este sentido, están presentes en la muestra las primeras tentativas con fibra de vidrio, con las que el artista comienza a investigar las fisuras de la mente y los mecanismos para construir significado, y los neones, con los que reflexiona sobre las rupturas y arritmias del lenguaje.

A rose has no teeth toma su nombre de una pieza paradigmática de esta época, una plancha metálica sobre la que se inscribe esta leyenda, adaptada al tronco de un árbol. Están igualmente incluidas en la exposición dos de sus primeras esculturas, Cup and Saucer falling over y Cup merging from its Saucer, ambas realizadas en 1965 cuando el artista tenía 25 años. Siendo todavía un estudiante, Nauman realizó una serie de performances a partir de gestos sencillos y acciones derivadas de la manipulación de un tubo fluorescente con el fin de obtener formas humanas y algunas de éstas fueron grabadas en vídeo. Estos trabajos en vídeo son documentación de las acciones pero al mismo tiempo una reflexión sobre las propiedades del lenguaje fílmico. La exposición concluye con una de las piezas míticas del artista, su Performance Corridor, de 1969. Se trata de la primera de una larga serie de piezas de espacio con las que el artista propone una reflexión sobre la experiencia.