Javier Melguizo
Plaza pública. 2001
El trabajo último de Javier Melguizo (León, 1971) ha evolucionado hacia un refinamiento de su lenguaje desde que abandonara las formas orgánicas que caracterizaban su pintura de hace dos años. Ciertos matices de esa obra anterior son aún perceptibles pero la depuración de los elementos es evidente hasta el punto de crear un diálogo entre ambos conceptos que provoca una colisión frontal. De una parte, la exposición muestra dípticos que enfrentan imágenes de grupos de gente a superficies abstractas de gestualidad contenida. De otra, Melguizo presenta un conjunto de pinturas que juegan a conciliar tensiones entre opuestos. Pequeñas piezas que tratan el tema desde la versión constructivista a la rothkiana. Finalmente, las pinturas de estructuras que parten de una poética escultórica, cajas cerrdas y abiertas, y derivan en un análisis de las propiedades del color.