Image: Tillmans, indisciplinado y frágil

Image: Tillmans, indisciplinado y frágil

Exposiciones

Tillmans, indisciplinado y frágil

Wolfgang Tillmans

4 diciembre, 2008 01:00

HMD 1 (104), 2007

Galería Juana De Aizpuru. Barquillo, 44. Madrid. Hasta el 17 de enero de 2009. De 5.000 a 52.000 euros.

Desde su primera individual en la galería madrileña hace tres años, el trabajo del alemán Wolfgang Tillmans (Remscheid, 1968) ha gozado de una importante retrospectiva itinerante en algunos de los más importantes museos de Estados Unidos, completándose así un reconocimiento internacional que se inició a partir de 2000 con la concesión del Turner Price al primer artista no británico, aunque Tillmans llevara viviendo en el Reino Unido una década.

Vinculado primero a revistas de moda y después a la plasmación poco convencional de la vida cotidiana de los jóvenes, desde su rechazo al lenguaje de lo importante ha ido construyendo una posición convincente y de enorme influencia dentro del fotoconceptualismo. Su propuesta viene a ser el reverso de la estela dejada por Jeff Wall con su exquisita construcción de tableaux en enormes cajas de luz que, aunque también puedan remitir a aspectos marginales de la vida urbana, contienen una reflexión constante sobre la representación dentro del marco de la historia de la pintura occidental. Por el contrario, Tillmans no pretende que sus imágenes sean investidas del antaño prestigio de la pintura, y su consideración de la objetualidad de la fotografía pasa por la aceptación de su estatus en la sociedad contemporánea y su cuestionamiento, planteando la simultaneidad de grandes copias junto a las pequeñas fotos sujetadas con chinchetas a la pared; las instantáneas souvenirs de experiencias y las escenas construidas y seleccionadas; la actualización de los géneros tradicionales -retrato, bodegón, paisaje- bajo una mirada próxima pero dispersa junto a las fotocopias sobre imágenes de prensa y los experimentos formales, con procedimientos químicos o composiciones de color, impresos sobre cartón plegado y protegido por una caja de plástico metacrilato. Otro de los formatos preferidos de Tillmans son los libros, como Why we must provide HIV treatment information (2006), con que el fotógrafo contribuye a difundir un congreso en el que se expusieron las estrategias llevadas a cabo en áfrica, cara a la prevista distribución mundial de retrovirales en 2010, pero que será poco efectiva sin información: algunas de esas fotos se encuentran en esta exposición, aunque el libro puede bajarse de la página del artista. Su compromiso también con la vitalidad de la práctica artística le ha llevado a asumir el cargo de profesor de arte interdisciplinar en la Städeleschule en Francfurt, así como a dirigir Between Bridges, un espacio expositivo en Londres.

Esta exposición no defraudará a sus seguidores. Encontrarán el característico montaje en mosaico abierto a asociaciones con falsas fotocopias y fotografías recientes, incluidas algunas crudas de temática homoerótica que quedaron fuera en la anterior exposición. Y un buen conjunto de ejercicios visuales, como las elegantes "gotas de papel" y varias modalidades de la serie Lighter de cartulinas plegadas, que en su esteticismo vuelven a ser una exaltación de la belleza de lo efímero y frágil. Sin embargo, queda mucho por ver de la producción experimental y transversal de Tillmans, de manera que tras la única exposición institucional en el Espacio Uno del MNCARS hace diez años, parece que ya sería hora de que algún centro abordara un proyecto a la medida de este artista interdiciplinar.