Mara Dierssen, experta en neurociencia: "El desafío es descifrar cómo surge la actividad mental"
La neurobióloga, autora de 'La ciencia de la memoria' o 'El cerebro del artista', participa este jueves en las Nobel Prize Conversations que organiza la Fundación Ramón Areces.
26 junio, 2024 02:33Señala Mara Dierssen (Santander, 1961) en su libro La ciencia de la memoria (editorial Shackleton) que “la psicología y la neurociencia dedican grandes esfuerzos a desentrañar la naturaleza y el funcionamiento de la memoria y el aprendizaje”.
Dierssen también, ya sea en el grupo de Neurobiología Celular y de Sistemas del Centro de Regulación Genómica de Barcelona (CRG), o en intervenciones como la que realizará este jueves en la Fundación Ramón Areces dentro de una nueva edición de las Nobel Prize Conversations.
Titulado The impossible takes longer (Lo imposible lleva más tiempo) Dierssen participará junto al Nobel de Física George Smoot y la Nobel de Fisiología Katalin Karikó.
“El pensamiento abstracto y la creación artística están asociados a la evolución intelectual de nuestra especie”
“Desde la comprensión de fenómenos como la gravedad cuántica, la teoría del todo o la materia oscura y la energía oscura hasta la cura de enfermedades complejas como el cáncer, el Azheimer o enfermedades genéticas son problemas que parecen imposibles de resolver con el conocimiento y la tecnología actuales. Sin embargo, con suficiente tiempo y esfuerzo, pueden llegar a ser comprensibles”, explica Dierssen, autoridad mundial también sobre el Síndrome de Down.
Pregunta. ¿Cree que la neurociencia ha tenido un impulso especial en las últimas décadas?
Respuesta. Ciertamente. Este progreso puede atribuirse a una serie de avances tecnológicos en el desarrollo y la mejora de técnicas de neuroimagen, la electroencefalografía, la estimulación magnética transcraneal o incluso técnicas como la optogenética, que permiten observar y manipular la actividad cerebral en tiempo real. A esto se suman los avances en genómica y técnicas de edición genética como el CRISPR. El uso de modelos computacionales y simulaciones nos están permitiendo probar hipótesis y analizar datos a una escala que no sería posible con experimentos tradicionales.
P. ¿Es la neurobiología el camino más corto para entender completamente el funcionamiento del cerebro?
R. Aun reconociendo la importancia fundamental del sustrato biológico, es evidente que la mente posee propiedades que requieren una comprensión multidisciplinar y hemos de entenderla como el resultado de factores psicológicos, sociales y culturales.
P. ¿Cómo explicaría el impulso biológico del arte?
R. El desarrollo del pensamiento abstracto y la creación artística sin fines utilitarios en los humanos está asociado a la evolución intelectual de nuestra especie. El cerebro humano ha desarrollado una gran capacidad de adaptarse al entorno, permitiéndonos independizarnos en cierta medida de las leyes evolutivas clásicas, si bien ello nos hace depender mucho de los estímulos externos para adquirir conocimiento. Este conocimiento necesita transmitirse a través de la cultura, un fenómeno derivado del agrupamiento social. Así, soportes como la escritura, el dibujo y la música constituyen una representación interpretativa del mundo, un almacén de memoria y una herramienta de transmisión de conocimiento.
P. ¿Qué le han enseñado sus investigaciones sobre el síndrome de Down?
R. He aprendido que las limitaciones que asumimos que tienen en realidad son mucho menores de lo que pensamos y que en muchas ocasiones son fruto de nuestros propios prejuicios y estereotipos. Pero quizá lo que más me ha llamado la atención es la gran sensibilidad de estas personas, su inteligencia emocional y su enorme entusiasmo.
P. Volviendo al encuentro de la Fundación Ramón Areces, ¿qué estrategias debe seguir el científico para dar con un hallazgo importante?
R. No existen estrategias más allá de una buena pregunta, comprender lo que se sabe y lo que queda por descubrir, escoger bien la manera de abordar la pregunta, discutir mucho para intercambiar ideas, y respetar los principios de integridad científica. La constancia y el tesón indudablemente son clave para alcanzar nuestros objetivos, como lo es la resiliencia y la tolerancia a la frustración.
P. ¿Qué piensa del trabajo en equipo? ¿La investigación futura será multidisciplinar o no será?
R. La ciencia actual es ya multidisciplinar y sigue avanzando en esa dirección. Cada vez más, los desafíos complejos que afronta la ciencia requieren enfoques que integren múltiples disciplinas. Esto no está exento de problemas. Las disciplinas a menudo tienen su propio lenguaje y sus propias metodologías y enfoques conceptuales. Esto puede dificultar la comunicación efectiva entre investigadores de diferentes campos. Tiene que haber una buena idea y un sentido detrás de la interdisciplinariedad.
P. ”Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes”. ¿Qué demostraba Borges con esta intuición?
R. Borges a menudo exploraba temas relacionados con la memoria, el tiempo, y la identidad, y esta cita encapsula varias de sus ideas clave. Nos sugiere que la memoria es lo que nos define, pero, al mismo tiempo, reconoce su fragilidad y mutabilidad, planteando cuestiones sobre la naturaleza de la realidad y nuestra percepción de ella. La referencia a lo “quimérico” implica que nuestra memoria es ilusoria y en constante transformación, lo cual puede distorsionar la realidad. Y, de hecho, sabemos que la memoria no es una réplica exacta de nuestras experiencias, sino una construcción subjetiva y que cada vez que traemos un recuerdo al plano consciente de alguna manera lo “reinventamos”.
P. ¿Cuál es su desafío científico? ¿Qué preguntas se sigue haciendo?
R. Descifrar los códigos cerebrales, cómo del complejo entramado celular y molecular que es nuestro cerebro puede surgir la actividad mental. Y, más alcanzable, seguir estudiando cómo funcionan las redes neuronales y los circuitos cerebrales en la formación, consolidación y recuperación de recuerdos. Me interesan mucho los mecanismos diferenciales entre memorias fugaces y duraderas. ¿Qué mecanismos subyacen a la persistencia de la memoria? ¿Es tal persistencia real, conociendo la labilidad de la memoria? ¿Dónde están esos recuerdos?