Los actores manipulan los títeres a cuerpo descubierto. Foto: M.R.

Sexo sin tapujos. El teatro se destapa con la original propuesta de 13 polvos, que se estrena el día 18 en el Arlequín de Madrid, y que coincide con la polémica XXX de La Fura, que llega el 11 de septiembre al Teatro de Madrid, y Pornografía barata, en La Abadía el día 16.

13 polvos es, más que una función, una experiencia artística, uno de esos escasos ejemplos de concentración de artistas en torno a un proyecto cultural, que en este caso lleva como nombre Grupo ¡Ni! y que está formado por once actores, el director argentino Sergio Rosemblat y el artista plástico Papín Lucadamo. Su punto de partida es una combinación bastante inusual: los títeres con la temática pornográfica.

Su creador, Sergio Rosemblat, asegura que el resultado de este mestizaje tendrá un gran impacto sobre el espectador: "Los títeres son una metáfora, y el porno es la carne. En esta unión no hay una transición entre la ternura de los muñecos y la vergöenza del sexo. Tiene un resultado muy curioso y ambiguo: ni te calienta ni te entristece".

Rosemblat se ha reunido de jóvenes actores que han tenido que aprender las técnicas de manipulación de títeres -"quería trabajar con actores y no titiriteros. Además aparecen en el espectáculo a cuerpo descubierto"-, dice Rosemblat que, con 60 montajes a sus espaldas, se ha instalado en España: "Quiero hacer teatro español". Los intérpretes también han creado el texto de la función, y han participado en las labores de creación de vestuario, iluminación y de sonido.

Trece historias sexuales
Así, poco a poco, fueron saliendo historias como la de un matrimonio de carniceros que encuentran el placer en las heridas que se hacen con los cuchillos, o la de una vieja que consigue que el cadáver de su difunto marido tenga una erección por obra y gracia de un baile erótico. ¿El nexo en común de las trece historias y los 24 personajes?: El sexo y el humor. Cuerpos entrelazados de papel cuché y gimnasia del amor supeditada a hilos y varillas. Títeres y actores comparten historias de incesto, homosexualidad, tríos, sadomasoquismo... Sin embargo, como dice Rosemblat, "lo porno sucede en tu cabeza, no en el escenario".

En esta aventura artística destaca la presencia del artista argentino -afincado en España- Papín Lucadamo, quien ha dotado de aliento estético tanto a las marionetas como al espectáculo en sí. "Era la primera vez que trabajaba con títeres y eso me ha permitido tener una gran libertad ya que tenía pocos referentes", asegura el artista, que expondrá todos los títeres en el estudio de interiores O.T.O. de Madrid, los días 1, 2 y 3 de octubre.

XXX: La Fura más polémica
Ha pasado un año de su estreno y la polémica que ha acompañado a XXX en España y Europa no ha disminuido ni un ápice. Madrid se prepara para recibir este espectáculo explícito y sin concesiones -que fue portada de El Cultural el 24 de julio de 2002- inspirado en La filosofía en el tocador, del marqués de Sade. Carles Padrissa y Alex Ollé han ideado un montaje multimedia, como suele ser habitual en La Fura, que busca un nuevo espacio escénico y una nueva estirpe de actores, el "ciberactor".