Image: Peter Brook vuelve a Beckett

Image: Peter Brook vuelve a Beckett

Teatro

Peter Brook vuelve a Beckett

El Festival de Temporada Alta de Gerona presenta "Días Felices"

25 noviembre, 2004 01:00

Miriam Goldschmidt como Winnie en un momento de días felices

El Festival Temporada Alta de Gerona presenta el 26 de noviembre la segunda producción que Peter Brook dirige de Días Felices, de Beckett. Miriam Goldschmidt protagoniza este inquietante monólogo en el Teatre de Salt

Dice Peter Brook que "siempre que se decide llevar a escena una pieza de Beckett se alzan las voces que señalan que sus obras son muy negativas. Yo, sin embargo, creo que no hay nada más positivo que las obras de Beckett". Y aclara el director que "el hecho de que una cosa sea positiva no tiene nada que ver con el optimismo. Lo que es positivo es evidente, se crea a partir del realismo. La visión de Beckett no es ni optimista ni pesimista, sólo es realista". Y concluye que la reacción del público en una obra de Beckett "puede ser la misma que la de sus personajes en las situaciones que les toca vivir. El optimismo que anhelan continuamente puede ser la peor manera de huir de la realidad. Cuando culpamos a Beckett de ser pesimista nos convertimos nosotros mismos en personajes de Beckett en una obra de Beckett". Nuevamente, Brook nos da las claves para leer a este autor de origen irlandés que, como él, fue uno de los ilustres que París adoptó.

ésta es la segunda vez que Brook lleva a escena esta obra, clave en el teatro del dramaturgo. Y es que Beckett, junto con Shakespeare y Chejov -antológicas fueron sus puestas en escena de El rey Lear y The Cherry Orchard- son los dramaturgos que mejor han sido llevados a escena por Brook, creador de un estilo inconfundible. Quizás el máximo exponente de su trabajo sea su épico El Mahabharata.

Días felices fue una pieza que el director montó en la década de los 60 con la que entonces compartía su vida, la actriz Nastasha Parry, quien hizo de la inmortal y monologante Winnie. Esta mujer, que se nos muestra enterrada hasta el cuello en una montaña calcinada y que apenas recibe contestación de su pareja escénica, es la protagonista de una pieza en la que no deja de repetir que sus días son felices, aunque todo indique lo contrario: "Con las pocas cosas que me quedan y mis últimas ilusiones cada vez me hundo más en mi vacío, pero trataré de ser feliz. Total, sólo es cuestión de proponérselo", se dice el personaje.

Esta tediosa existencia que su protagonista intenta sortear la analiza Brook de esta manera: "En Días Felices, Winnie, enterrada hasta el cuello, es cómplice de su propio destino. No pide que la liberen. No lucha contra Dios. Se ha ido adaptando cada vez más a las particularidades de su vida. Y es aquí donde está su tragedia... Beckett en todas sus obras se limita a mostrarnos que la complicidad con nuestras desgracias tiene muchas caras".

Esta producción tiene ya dos años y ha recorrido varios teatros europeos. Está protagonizada por una de las actrices de la compañía de Brook, Miriam Goldschmidt, a quien acompaña Wolfgang Kroke. Se trata de una producción del teatro Kaserne de Basilea, por lo que su representación se hará en alemán con subtítulos en castellano.