El mundo del pequeño Julius rodeado de adultos en la Lima anglófila y ridícula de las clases altas dio pie a la que seguramente es la mejor novela de Alfredo Bryce Echenique. Plagada de elementos autobiográficos, de grandes dosis de humor, y de un uso magistral del lenguaje -como en todas sus obras- esta novela es la mirada desolada de un niño sobre un entorno que no comprende, que a menudo se le presenta como hipócrita. ¿Dónde encontrará Julius su verdadero mundo?: entre fogones, con los criados de la casa. En territorio prohibido.