Muertes de andar por casa
Fernando Sánchez Calvo
17 enero, 2008 01:00Sánchez Calvo bebe en sus textos de las vanguardias europeas. Tal vez por eso prologa el volumen la traductora de Me acuerdo de Pérec, Yolanda Morató, quien afirma: "La vanguardia está viva, su espíritu vital permanece al frente, no como cuando rompió con las tradiciones y convencionalismos de hace ya más de un siglo, sino en el presente". Sin embargo, el presente sobre el que escribe Sánchez Calvo toma prestados elementos de la cultura pop, habla de la rabiosa soledad urbana y traza un escenario de desesperanzada incomunicación que no sólo le conecta con la vanguardia: también tiene algo de la generación beat, hasta de los kronen. Y lo mejor es que interpela a un lector exigente, participativo y amigo de los pequeños retos que ofrece la literatura.
Los 18 breves textos que conforman esta colección van de la dureza en el tratamiento del tema a la originalidad de su forma o a la utilización de recursos propios de disciplinas tan poco literarias como las conversaciones en internet. Es el libro de un observador de la cara menos amable de la realidad, pero también el de alguien que parece preguntarse si es posible volver la vista atrás para reinventar lo que ya parecía reinventado.