El cómic hace su feria
Títulos como Maus, Watchmen y Persépolis han acercado sus viñetas al gran público, algunos gracias al empujón del cine
10 junio, 2009 02:00Viñetas de Maus, Watchmen y Persépolis.
EFELos cómics han encontrado su mejor aliado en la Feria del Libro de Madrid, un escaparate que confirma que la historieta no está al margen de la literatura, sino que cobra protagonismo con títulos como Maus, "Watchmen" y Persépolis, que han acercado las viñetas a un espectro de público muy amplio.
"Sorprende que haya gente que viene buscando esos títulos, pensados para un público más general que no es específicamente comiquero y que ahora sí compra cómics", subrayaAna Faraco, encargada de la librería El aventurero, dedicada al mundo de la historieta.
Los responsables de El aventurero y Generación X, que han llevado con sus casetas centenares de cómics a la feria, atribuyen el auge del cómic a su vinculación con el cine, "que ha ayudado mucho" al género, según Faraco. Y es que las grandes producciones V de Vendetta, Watchmen, Iron Man y otras películas protagonizadas por los clásicos superhéroes, "han hecho que el cómic adquiera más importancia, que esos éxitos de taquilla se conviertan en leyendas y la gente vaya a comprar el cómic", afirma Ismael Contreras, de Generación X.
Contreras matiza que la afluencia de gente "que viene del cine y se pasa al cómic" no es tan determinante, y que el recorrido suele ser el inverso: "la gente que ha leído Watchmen ha ido a ver la película". Pero también hay cómics que nacen junto a la película, como El curioso caso de Benjamin Button, basada en el relato de Scott Fitzgerald, y Coraline, de Neil Gaiman, ambas bien recibidas por el público de la Feria, según Faraco, "porque cuando hay película, a no ser que sea muy mala, el cómic se vende".
La publicidad, las reseñas en medios de comunicación y el aumento de puntos de venta han sido determinantes, según los libreros, para que este año los compradores de cómics de la Feria sean "de todos los colores, desde los cinco a los setenta años, que buscan parodias, superhéroes y el Capitán Trueno, que se sigue vendiendo", asegura Contreras.
"En la Feria del Libro se vende mucho más que en la tienda, sobre todo al público infantil", apunta Faraco, para quien han surgido dos nuevos géneros que amplían el espectro de público: el cómic manga para niños y la novela gráfica para adultos.
Los lectores de cómics se acercan a los estands de la Feria buscando títulos concretos, pero muchos visitantes se detienen ante portadas que les son cercanas, ya sea por la asociación con una película o porque el nuevo "cómic social", con novelas gráficas como Arrugas, María y yo e incluso el cómic sobre los atentados del 11 de marzo, despiertan el interés por las viñetas.
Maus, la novela gráfica de Art Spiegelman ganadora del Premio Pulitzer en 1992, es el ejemplo más claro de cómo un cómic puede estar y mantenerse en las listas de los best sellers y convertirse en una apuesta segura en librerías no especializadas.
"Los que más se venden son los clásicos", apunta Sole González, de la FNAC, que este año destaca los cómics en su oferta literaria, una confirmación de que la historieta está presente más allá de las tiendas fieles al género.
El lector de cómics ya no es sólo aquel que acudía al quiosco para coleccionar los tebeos de grapa por fascículos porque, en los últimos años, ha habido un cambio de formato "que vincula el cómic a la novela, que agrupa los fascículos en un sólo tomo, como las temporadas de las series de televisión", sugiere el encargado de Generación X.
Además, el lector ha podido acercarse a nuevos títulos, alejados de iconos españoles como Mortadelo y Filemón, porque hay un aumento editorial: "si hace diez años era difícil encontrar cosas en España es porque había que comprarlas en inglés o en francés; ahora todo está en castellano y la gente puede comprar más", concluye Contreras.