Patricia Martín y Eva Jiménez, las editoras de Flamboyant.

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Patricia Martín y Eva Jiménez dieron el salto a la edición independiente en 2009. Antes de eso trabajaban codo con codo en Sant Jordi Asociados, una pequeña agencia literaria barcelonesa centrada únicamente en llevar los derechos de autor del mediático Paulo Coelho en el mundo entero. La experiencia les contagió el amor por los libros, tanto es así que Eva decidió quemar sus naves y cruzar el charco rumbo a la Gran Manzana para cursar un máster en edición. A su regreso, se asoció con Patricia y fundaron en junio de 2009 la editorial Flamboyant, un sello dedicado a la ensoñación. De ahí su nombre, un homenaje a ese árbol tropical de copa frondosa y flor delicada que invita justamente a eso, a tumbarse bajo su sombra con un libro entre las manos y dejar que las horas fluyan perezosamente mientras se contemplan las delicadas ilustraciones que habitan las páginas de ese cuidado ejemplar.

"Vimos que en España estábamos muy atrasados en el terreno del libro infantil con ilustraciones de calidad, algo que a las dos nos interesaba mucho. Aquí no pasábamos de Lewis Carroll y poco más. De manera que nos inspiramos en el modelo nórdico, que tiene auténticos tesoros en ese terreno. También en Francia y Gran Bretaña se editan verdaderas joyas. En general en los países centroeuropeos los libros ilustrados tienen una calidad altísima y muchos adeptos, y nosotras queremos contagiar a los lectores españoles esta afición (explica Eva). Nos hemos encontrado con un público todavía un tanto reticente, pero estamos muy convencidas de que nuestros libros, que son exquisitos, acabarán por hacerse con fieles seguidores".

Y así, a mediados de 2009, las dos jóvenes editoras se lanzaron a rastrear los mercados internacionales como auténticas sabuesas, buscando aquí y allá joyas inéditas en España. En junio de ese mismo año lanzaron su primera colección, Pequeños Grandes Tesoros, con el objetivo de recuperar clásicos anglosajones que contaran bonitas historias destinadas a todos los padres que aman el libro cómo objeto y quieren transmitir a sus hijos la afición por la lectura y por la edición esmerada.

Llegó luego la serie dedicada al ilustrador y autor sueco Sven Nordqvist, toda una referencia en su país con sus imágenes exquisitas y delicadas y sus divertidos personajes Pettson y Findus que han llegado a protagonizar una serie infantil en la televisión sueca. Cuando Findus era pequeño y desapareció y Pettson se va de acampada son los primeros títulos de esa colección, a los que siguieron el álbum ilustrado ¿Dónde está mi hermana?, ganador del premio Augustpriset 2007 en la categoría de Mejor Libro Infantil y Juvenil del Año en Suecia.

Pero, hasta el momento, el gran éxito de la editorial ha sido la entrañable Berta Buena Fe está triste, de la autora e ilustradora francesa Magali Le Huche, "que ha seducido al público infantil español porque habla de un tema universal como la tristeza desde una perspectiva optimista, esperanzadora y nada ñoña", añade Eva Jiménez. "Las ilustraciones (continúa), además de ser bellas deben añadir contenido al texto, porque si se limitan a reflejar lo que se narra pueden ser mortalmente aburridas. Ahí está el valor añadido del libro ilustrado de calidad". Y por estos derroteros va a transcurrir la próxima temporada de este jovencísimo sello, liderado por dos editoras enamoradas en su tiempo libre de los grandes narradores norteamericanos cómo Scott Fitzgerald, John Irving y Paul Auster.