Benjamín Labatut y los sinuosos caminos de la locura
En el absorbente ensayo 'La piedra de la locura' el escritor chileno se cuestiona qué podemos entender realmente por locura en esta compleja realidad
29 noviembre, 2021 13:00En su reciente novela Un verdor terrible el chileno Benjamín Labatut (Róterdam, 1980) ya demostraba, a través de un apasionante recorrido por la física moderna, que la historia de la ciencia no es más que una continua pérdida de certezas. Un mundo de incertidumbre que deshilacha la cómoda realidad que el optimismo científico ha impuesto en Occidente desde la gran revolución del siglo XVII. Ahora, el escritor da un paso más en esta confrontación de la realidad en La piedra de la locura, una indagación sobre qué podemos entender por realidad, en la que se pregunta si podemos realmente hallar la verdad y cuáles son los límites de la locura.
Tomando como partida el conocido cuadro de El Bosco, aliñado a lo largo del texto con las paranoias literarias de H. P. Lovecraft, los delirios sobre multiversos y líneas temporales de Philip K. Dick y la cruzada del matemático David Hilbert para demostrar el mundo a través de la despiadada y fría lógica, Labatut construye un panorama desolador donde demuestra que la fe en el porvenir y en la razón que marcó épocas pasadas está en seria crisis. “Los bordes de la realidad han comenzado a sangrar, y muchos tenemos la sospecha de que el castillo de razón y orden que hemos construido puede ser fácilmente derrumbado”, escribe el autor.
En este absorbente ensayo Labatut cuestiona qué podemos entender por locura en esta compleja realidad
Como ejemplo, se lanza a analizar las sonadas protestas ocurridas en Chile en 2019, de las que asegura que “destruyeron el orden previo sin crear otro nuevo”. Un caos que Labatut juzga “tan común y omnipresente” que es ya “el centro de una nueva visión del mundo actual”. Es aquí donde introduce la locura, un elemento recurrente en su obra, para cuestionarse qué podemos entender por ella en esta compleja realidad.
Si las reglas del juego han cambio, ¿no deberían hacerlo los paradigmas de juicio? O dicho en sus palabras: “La razón no es nuestra única facultad, y tampoco es la más importante”. En este mundo de verdades tan esquivas, reflexiona, quizá volverse loco es una respuesta adecuada. Si verdad y sinrazón son lo mismo, es el precio que pagamos por el conocimiento.
“¿Podremos algún día extraer la piedra de la locura?”, se pregunta hacia el final del ensayo Labatut. Y concluye: “Intentarlo es una señal de delirio, de que la razón está sobrepasando sus fronteras, de que la ciencia y la medicina están extraviándose más allá de sus límites”. Y es que, como reflexiona, esa misma locura es una parte intrínseca de nuestra humanidad y sin ella quizá no sobrevivamos.