Ensayo

Piezas sobre arte

Paul Valery

12 marzo, 2000 01:00

Traducción de José Luis Arantegui. Visor, 1999. 282 páginas, 2.600 pesetas

El hombre completo se muere. éste es el mensaje que nos deja el hombre del fragmento, Paul Valéry, en un libro con el que Visor conmemora el número 100 de "La Balsa de la Medusa". Valéry concibe la obra de arte como el "acto de un hombre completo", y su muerte viene propiciada por la labor de pequeños matarifes de la crítica de arte, partidarios de la "retórica del choque" que lleva a la "disminución de la parte intelectual del arte". Y, sin embargo, este "maravilloso hacedor de palabras" es uno de los que más han contribuido a dignificar esa crítica de arte, denostada sólo en las insuficiencias de los excesos.

Su pequeño ensayo "La conquista de la ubicuidad" abría las reflexiones de Benjamin sobre la obra de arte en la época técnica. Es una lástima que no le hiciera caso. No se trata sólo de que las obras adquieran en su reproducción "una especie de ubicuidad", y de lamentarse por la pérdida de un aura que Baudelaire había dejado tranquilamente en el barro; es que en su visión de futuro Valéry apuntaba nada menos que "...nos alimentaremos de imágenes visuales y auditivas que nazcan y se desvanezcan al menor gesto, casi un signo". Y sabedor de que los filósofos están hoy día a la que salta, les proponía un negocio adecuado a sus capacidades: "...una sociedad para la distribución de Realidad Sensible a domicilio".

Es verdad que vivimos en una época que "es dura con los originales", que "ya no hay nadie", que "no hay más que masas". Pero lo mismo sucede también con la obra bien hecha y sostenida: "el hombre de hoy no cultiva lo que no se puede abreviar". Y así el verdadero aura de la obra de arte, acaba siendo su reproducción, no sólo bajo la forma de la copia sino, sobre todo, de la cita : "¡Con que eso es la Gloria... le cita cualquiera, y usted se cree que es alguien!...". Heidegger no hubiera analizado mejor nuestra existencia inauténtica en el olvido del Ser: somos entes palanganeros que ponemos comillas en la casa de citas de la historia.