Ensayo

Tómatelo con filosofía

Josep Muñoz Redop

7 febrero, 2001 01:00

Paidós. Barcelona, 2000. 187 páginas, 1.400 pesetas

Si es cierto, como afirma Adorno, que el ensayo sigue dejando traslucir el ocio de lo infantil que se entusiasma por lo que otros han hecho, este libro sería una muestra de tal aspiración. Mediante un estilo ligero y sabroso, el autor desgrana algunas de nuestras preocupaciones vitales más urgentes -el placer, la muerte...- tomando como punto de partida la óptica de nuestra vida cotidiana. El propósito de la obra es reflexionar sobre esos aspectos de nuestra vida diaria que, por su proximidad, escapan a nuestra atención. En este sentido, por utilizar las palabras de Barthes, Muñoz es un ejemplo típico del "escritor feliz" que registra con cierto gozo escéptico lo que le rodea porque quiere "tener el mundo al alcance de la mano". Aunque en su reflexión acerca del mundo actual Muñoz parece más interesado en ofrecer una actitud amable que en retomar la crítica inflexible de Sánchez Ferlosio o el talante polémico del mejor Savater.

Para terminar, una pregunta: ¿por qué empieza a ser tan frecuente esta preocupación balsámica por la filosofía? Porque, pese a las maniobras editoriales, la divulgación de "la filosofía" no ha de entenderse como un bien en sí mismo: es un saber que requiere no poco esfuerzo, cuando no una pasión por comprender que nada tiene que ver con la relajación de la lectura ociosa. Es más, puede que el saber filosófico sea más una fuente de desdicha que de felicidad. También hay ciertas lecturas de Platón tan anestesiantes como el prozac.