Los Franco S.A.
Mariano Sánchez Soler
4 septiembre, 2003 02:00La repetida alusión a la "familia" no es baladí, porque el Generalísimo no tenía entre sus defectos la ostentación personal y el despilfarro cotidiano. Le caracterizaba más bien una austeridad extrema, poso de su formación castrense. Si obviamos los caprichos por las alhajas de su esposa y algunos regalos inmobiliarios que recibió, no es hasta la incorporación del marqués de Villaverde (comienzos de los 50) cuando se produce un cambio notable. En palabras del autor, "el lujo se adueñó definitivamente del entorno familiar de Franco". A partir de ahí se desarrolla "una trama financiero-familiar" que Sánchez Soler caracteriza como "holding Franco", con una cantidad de bienes y empresas imposibles de cuantificar, debido a las argucias fiscales y contables, pero que deben situarse en la órbita de los miles de millones de las antiguas pesetas. Al cronista de estas andanzas tan poco edificantes se le termina yendo el pulso en el tramo final del libro, en el que reproduce una "retrato sexológico de las nietísimas" francamente prescindible, que no debería tener cabida en una investigación de estas características.