Image: Memoria socialista

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Ensayo

Memoria socialista

Pedro Carvajal y Julio Martín Casas

16 junio, 2005 02:00

Cartel electoral del PSOE (1982)

Temas de Hoy. 300 págs, 18 e. H. Graham: El PSOE y la guerra civil. Debate. 432 págs., 20 e.

El origen de este libro se encuentra en el documental Más de cien años, coproducido por la Fundación Pablo Iglesias y la televisión pública española. El interés del material recogido inspiró en los autores la idea de ampliar el trabajo en una obra de divulgación para aquellos interesados en conocer la historia del socialismo español.

Es, pues, un relato avalado por el partido, sin que ello impida el contraste de opiniones sobre la evolución del proyecto socialista, en particular en los últimos años, hasta la llegada de José Luis Rodríguez Zapatero. Los autores, que construyen el texto partiendo de las aportaciones de historiadores y de los testimonios de los protagonistas, se limitan a poner orden y amenidad, que no es poco. La obra tiene dos partes bien diferenciadas. La primera, la más sólida, la proporcionan las contribuciones de calidad de estudiosos como Santos Juliá, Manuel Pérez Ledesma, Mercedes Cabrera, Aróstegui y otros. A partir de la etapa de la renovación de los años sesenta, los protagonistas casi absolutos son los propios actores de los acontecimientos, sobre todo de la generación de Felipe González, que dan testimonio de sus recuerdos y valoraciones.

Quedan recogidos hitos fundamentales de la historia de los socialistas que han tenerse en cuenta. La larga etapa de juventud tutelada por la personalidad del fundador. La colaboración con los republicanos a partir de 1909, que significó la asunción del republicanismo como una seña de identidad. El espinoso asunto de la colaboración con la dictadura del general Primo de Rivera. La aparición de los nuevos líderes, Julián Besteiro, Francisco Largo Caballero e Indalecio Prieto, que preponderaron en la República y las divisiones en el seno del partido entre la tendencia socialdemócrata y la revolucionaria. La opción por el socialismo evolutivo de Largo es abandonada al tener que dejar el poder y se apuesta por la revolución brusca de octubre de 1934, la gran mancha histórica del socialismo español. Al poco, la guerra civil y las divisiones entre Juan Negrín y los viejos enemigos, Largo y Prieto, asuntos estudiados en profundidad por Helen Graham en El PSOE y la Guerra Civil. Poder, crisis y derrota, en el que analiza las corrientes internas del partido antes y durante la guerra civil, así como la evolución, aciertos y contradiccionesde sus líderes.

Tras la derrota y la represión, una vez consolidado el franquismo, vendrá la renuncia a una lucha considerada inútil. El exilio acarrea la relativización de la apuesta republicana, un anticomunismo inflexible y el alineamiento con Occidente.

En los años sesenta la ebullición del antifranquismo exigió la presencia de viejo partido en el interior, lo que inició el proceso que acabó en Suresnes, en 1974, cuando la generación de Felipe González tomó las riendas del partido con tal empuje que lo llevó a la mayoría absoluta en 1982. La gestión de gobierno hasta 1992 fue la mejor etapa, consolidación de la democracia y modernización acelerada que culminó con la inserción definitiva en Europa a través de la Comunidad Europea y la OTAN. Luego, hasta 1993, la decadencia, corrupción y crimen de Estado, asuntos que en general sortean los políticos del PSOE, si es que no echan balones fuera atribuyendo sus desgracias a las conjuras. Todavía les cuesta reconocer la magnitud de sus responsabilidades. Desde 1993 a 2004 las divisiones, hasta la llegada de Rodríguez Zapatero, que les devuelve la ilusión y el poder en unas circunstancias imprevistas.

Es un libro bien hecho, esclarecedor en algunos aspectos, pero con escaso contenido crítico. Las creencias de fondo, la superioridad moral de las posturas de izquierda, que niega de hecho el valor del pluralismo, y el antiliberalismo, persisten. Las respuestas al fenómeno de la globalización aún no pasan del tópico solidario y bienpensante, pero se advierte una auténtica conexión entre lo que sienten las nuevas generaciones y el actual liderazgo del partido.