Ensayo

Sin raíces: Europa, relativismo, cristianismo, Islam

Joseph Ratzinger y Marcello Pera

18 mayo, 2006 02:00

Traducción. de B. Moreno y P. Largo. Península, 2006. 144 pàgs, 14 e.

Recoge este libro la lección que dio el presidente del Senado italiano -Marcello Pera- en la Universidad Lateranense en mayo de 2004, la conferencia que el entonces cardenal Ratzinger pronunció en el Senado al día siguiente y las cartas que se cruzaron entre ambos a raíz de ambas intervenciones.

El lector español no está habituado a que los senadores escuchen conferencias de cardenales ni a que en las universidades de la Iglesia hablen "laicos". En Italia, "laico" es el que no es creyente.

Marcello Pera hace un alegato en contra del multiculturalismo, como fruto del relativismo, e invoca francamente -como laico (en sentido italiano)- las raíces cristianas. Esto tampoco es usual entre nosotros y es imprescindible tenerlo en cuenta para comprender el alcance del libro. En la izquierda italiana, se distingue con más nitidez lo cultural de lo religioso. Así se entiende que un laico como Pera pueda coincidir con el análisis histórico que hace, en su intervención, el hoy Benedicto XVI: traza las líneas del desarrollo de la cultura europea desde el momento en que la idea imperial de Roma se dejó penetrar por el cristianismo; explica los procesos de formación y fragmentación que sufrió la unidad cultural europa, sobre todo con cismas y reformas religiosas; subraya el papel en la cohesión europea de la permanencia del Imperio Romano como ideal político y describe con acierto las paradojas de nuestro tiempo, como que los occidentales nos sintamos atraídos por las culturas orientales al tiempo en que los orientales procuran hacerse occidentales.

Antes, en su lección, Marcello Pera ya había puesto el dedo en la llaga, al referirse al relativismo como el generador del multiculturalismo. Pero va a más: rechaza frontalmente la idea de que todas las culturas son iguales -igual de buenas e igual de malas- y que merecen la misma consideración. De hecho, no la merecen, dice. Ni los musulmanes ni los judíos respetan las culturas cristianas. Lo paradójico, sin embargo -sigue Pera-, es que, entre los europeos, el relativismo no ha producido sólo el multiculturalismo, sino que ha generado una rebeldía contra sus raíces; rebeldía que hace de él un relativismo intolerante. Apunta, como prueba, el hecho de que, en Europa, se tutele incluso jurídicamente el respeto al Islam y al judaísmo y al mismo tiempo la libertad de expresión para escarnecer el cristianismo. (Lo singular, para un hispano, es que lo diga un laico, en sentido italiano).

¿Y el futuro? El que fue cardenal Ratzinger recuerda la vieja idea de que se puede ser dictador sin Dios pero no se puede respetar la libertad sin Dios. Pero no sueña (la ha rechazado expresamente en varias ocasiones) con la formación de una nueva "sociedad cristiana". El hoy Papa recoge la tesis toynbeeana (que suscribe Marcello Pera) de que el futuro está en manos de las minorías que fecundan la cultura e insiste en la idea -la única, que yo sepa- en que discrepó tácitamente de Juan Pablo II: el futuro de los cristianos es justamente el de una minoría que sazone el mundo. Marcello Pera lo celebra y propone la colaboración de los laicos (en sentido italiano). En suma, un libro ágil, sencillo y enjundioso a la vez, sobre cosas que, ciertamente, requieren reflexión por parte de todos.