Diccionario de Budismo
Philippe Cornu
28 mayo, 2010 02:00Buda en Kamakua (Japón)
El Diccionario del Budismo de Philippe Cornu es una obra única en su género. En primer lugar, porque antes no existía nada parecido en esta materia y con tal grado de planteamiento informativo y científico. Luego, porque como el mismo autor intuyó, se trataba de una aventura intelectual que estaba cerca de lo "imposible", de lo "sumamente temerario". Diccionario fijado no exclusivamente en términos sino en verdaderos artículos,no sólo de las manifestaciones que sobre el budismo se dieron en India sino fuera de Asia. Bien es verdad que Cornu es, sobre todo, un especialista en el budismo tibetano, y que en él ha sustentado una buena parte de su trabajo, pero ninguna fuente originaria le ha sido ajena y por eso el budismo hindú o el chino, las diversas corrientes que irradiaron desde la India del imperio de Asoka y el siglo III a. de C. Luego vendría su expansión hacia China, en el siglo I, coincidiendo con el surgimiento del cristianismo. Hay que abrir las páginas del Diccionario para darse una idea de la importancia de esta obra y de su poder de síntesis.
Centrada en la filosofía china está la segunda de las obras, la cual también busca lo esencial. Wolfgang Bauer fundamenta su libro en las influencias y corrientes del confucianismo y del budismo, sin olvidar el estudio de autores concretos ( Mo Di, Zhuangzi, Lie Zi o tantos otros maestros de las corrientes confucianas y budistas). El libro de Bauer muestra un maravilloso equilibrio entre historia y teoría, conocimiento y espíritu, sin caer nunca en el fárrago. En tal sentido, esta obra es modélica por bien escrita y escencial.
Al hilo de estas dos obras y de esa mirada, en profundidad, hacia Oriente, quisiera terminar poniendo el ejemplo de dos grandes estudios que han visto la luz entre nosotros de la mano de la editorial Kairós: La sabiduría de la no-dualidad. Una reflexión comparada entre Nisargadatta y Heidegger, de Mónica Cavallé, y Filosofía de la india. Del Veda al Vedanta, de Fernando Tola y Carmen Dragonetti. Ambas obras ya subrayan, en títulos y en subtítulos, por dónde va el análisis admirable. En tiempos de tanta erudición seca, no debemos ignorar la aparición de estas obras que no sólo nacen en nuestro país para enriquecer nuestro pensar, sino que poseen el poder de revelarnos un conocimiento que no pasa y un diálogo entre culturas (en el caso de Mónica Cavallé) emblemático e insustituible entre los estudios de estas características.