Image: Nuestro GG en La Habana

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Novela

Nuestro GG en La Habana

Pedro Juan Gutiérrez

30 septiembre, 2004 02:00

Pedro Juan Gutiérrez. Foto: Mercedes Rodríguez

Anagrama. Barcelona, 2004. 120 páginas, 13 euros

El cubano Pedro Juan Gutiérrez (1950), autor de la pentalogía narrativa Ciclo de Centro Habana, aborda ahora una fórmula más liviana, parodiando aquí un título de Graham Greene, ya que GG no será otro que el novelista inglés convertido en protagonista.

La acción se sitúa en la capital cubana en julio de 1955, durante la guerra fría, cuando La Habana era juego y crimen, donde convivían agentes secretos del fbi, del m15 y m16, del kgb y grupos mafiosos neoyorquinos que pretendían, con el beneplácito de Batista, vender un paraíso a los turistas estadounidenses que lo preferirían a Miami: "Aquí todo es perfecto, Mr. Greene. [...] Los cubanos siempre sonríen a la vida porque esto es un paraíso", le dice uno de los mafiosos al novelista inglés. La trama de intriga está urdida con materiales que parecen extraídos de las novelas de Greene, aunque aquí aparece más sal gruesa, más sexo explícito, una visión de la urbe degradada y sucia, como en anteriores novelas del autor.

Todo se inicia con una confusión. Un turista inglés, cuyo apellido es Greene, es confundido en el hotel con el autor de El americano tranquilo, que acaba de finalizar esta novela en Capri. Pedro Juan Gutiérrez reproduce un documento auténtico, si no inédito, poco divulgado: la carta de Allan Dulles, en aquel momento director de la cia, a Fulgencio Batista, donde se le propone una íntima colaboración con los militares estadounidenses acerca de la técnica para combatir la penetración comunista internacional en la Isla. Pese a que se le pide al escritor que se refugie en cualquier rincón de Europa tras un episódico escándalo en la prensa, Graham Greene elige viajar a La Habana, donde puede observar de cerca los movimientos secretos de la mafia. Para que nada falte a la intriga, el falso Greene se lía con un homosexual que actúa en un espectáculo pornográfico de los barrios bajos y en su camerino policía y amantes descubrirán el cadáver de un hombre. Militantes antinazis, entre tanto, se dedican a eliminar a los que buscaron refugio en la capital. Y gg presenciará uno de los asesinatos. Con este explosivo cocktail, Pedro Luis Gutiérrez ha escrito una "nouvelle" o novela corta, en la que destacan el ritmo trepidante y, a la vez, el pensamiento y la personalidad de un Graham Greene psicológicamente bien captado, del que se utilizan en el relato algunos textos de su novela de 1955. Se aprovechan, además, lances de la vida real del novelista inglés, como su estancia en Indochina y su relación amorosa con la joven budista Fuong, así como su indefinida colaboración con los servicios de inteligencia británicos.

Nuestro GG en La Habana es algo más que un "divertimento"; resulta una narración sólidamente trabada, dentro de su brevedad, que ofrece una perspectiva histórica de La Habana, y, a la vez, la visión del mundo a través de un escritor convertido en personaje de novela. El método no es original, pero el empleo del diálogo, el ritmo del relato y la utilización de la novela de género hacen de su lectura un reclamo para cuantos admiramos la obra del atormentado escritor católico Graham Greene.