Novela

Patraña

Màrius Serra

2 noviembre, 2006 01:00

Màrius Serra. Foto: Archivo

Traducción de Roser Berdagué. Planeta. Barcelona, 2006. 392 páginas, 21 euros

Màrius Serra (Barcelona, 1963), autor de miles de crucigramas y artículos periodísticos, tres libros de ludolingöística y algunos más de cuentos y novelas por los que ha recibido galardones en las letras catalanas, ganó con Patraña, en su edición en catalán, el premio Ramón Llull 2006. Su historia desarrolla un divertimento que se propone ofrecer una revisión crítica de la sociedad catalana de nuestros días con un enfoque sustentado en la parodia, la comicidad y el humor. En el Fòrum Universal de les Cultures celebrado en Barcelona en 2004 aparece un grupo de inmigrantes sin papeles que se habían manifestado en el Museu del Barça, desde donde son trasladados hasta el Fòrum. Aquí un prestidigitador, el Gran Morelli, adapta a la nueva realidad social la capacidad de transformación del armario de Proteo, inventado en el siglo XIX por el mago francés Robert Houdin. Dicha adaptación consiste en que el inmigrante que se somete a la prueba sale del mágico armario convertido en ciudadano europeo, hablando catalán, con documento de identidad, tarjetas de crédito y carné del Barça, además de coche, vivienda y trabajo. Y a continuación desaparece.

A partir de tamaña transformación se suceden diferentes situaciones en dos ambientes que se van alternando en la narración. Por un lado se atiende a los familiares y amigos relacionados con el inmigrante desaparecido y las maravillas del Gran Morelli. Por el otro, la acción se concentra en el casino, por donde va desfilando una curiosa gama de jugadores, entre los que sobresale un individuo con vocación de escritor que apuesta sólo a rojo y negro, por lo cual se le conoce como Sten (Stendhal). El nexo que relaciona estos dos ambientes está representado por el Gran Morelli, cuyos trucos han llegado hasta el casino en la aparición de una nueva promoción de crupiers formada por inmigrantes transformados. Pero la opinión pública empieza a preocuparse por los desaparecidos y, como por arte del escamoteo, las cosas vuelven a ser como al principio.

Partimos del colosal engañabobos del Fòrum de les Cultures y acabamos con la farsa del discurso de la autoridad política, encarnada por el Gran Morelli ahora convertido en el honorable señor Morell, que clausura el Fòrum con palabras vacías de contenido, en abierto contraste con lo que está ocurriendo en la calle. En el medio se desarrollan múltiples situaciones cómicas y disputas humorísticas acerca de la catalanidad y sus orígenes, las relaciones entre magia y política en la actualidad y entre magia y literatura. En este sentido, la novela hace honor a su título, pues todo resulta una patraña. Creo que lo más interesante hay que buscarlo en las consideraciones sobre prestidigitación y literatura, con lúcidas reflexiones metanarrativas a cargo del librero Xavier y también de Sten en su búsqueda de la escritura perfecta. Por doquier se descubre una actitud lúdica (con autocita de la página web de ludolingöística del autor) en frecuentes juegos de palabras, y con los pronombres en la continua mutación de la identidad personal del yo narrador, lo cual conduce hasta el manierismo gratuito en artificiosas parodias de la narratología, aunque a veces aflora el humor de la mejor calidad en reflexiones de tipo sociolingöístico como las referidas al pronombre catalán nosaltres con sus variantes formales e implicaciones colectivas.