Image: El camino inmortal

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Novela

El camino inmortal

Jean-Christophe Rufin

9 mayo, 2014 02:00

Jean-Christophe Rufin

Traducción de J.R. Monreal. Duomo, 2014. 224 pp. 16 e. Ebook: 9'99 e.

Hay personas que hacen de sus vidas una búsqueda hacia la inmensidad de la tierra, de sus culturas, de sus creencias. Para quienes el conocimiento cultural, el viaje y el descubrimiento es lo más preciado. Ese es el caso del escritor, médico y diplomático francés Jean-Christophe Rufin (Bourges, 1952), que convierte su último viaje en solitario en protagonista de su nuevo libro. Embajador de Francia en Senegal, fundador de Médicos sin Fronteras, miembro de la Academia Francesa y autor de dos obras que han recibido el Goncourt, El abisinio (1997) y Rojo Brasil/em> (2001), Rufin publica ahora El camino inmortal, relato de su experiencia como peregrino del camino de Santiago.

El libro cuenta de forma cronológico los pasos que conducen al escritor a realizar este camino, y las diferentes etapas que sigue el caminante. El tema del viaje, que aparecía ya en las novelas anteriores de Rufin, adquiere aquí una dimensión espiritual. El viaje que narra resulta sumamente interesante. Primero, porque no es el típico peregrino que sigue una idea mística. Al contrario, no sabe si realmente tiene una razón, simplemente siente que "el camino le llama". Segundo, porque el escritor parece contarnos a través de su experiencia, la verdad de dicho viaje. Aquella que no nos cuentan los que han regresado y que, sin embargo, existe. El autor, que parte de Hendaya con su mochila a cuestas y en solitario, no solo sentirá el cansancio del caminante y las ampollas en los pies, sino también la fatiga moral, la falta de aliento al recorrer las inmensas autopistas de Cantabria que, como dice, "echan al peregrino", las fuertes ganas de abandonar. Poco a poco, el caminante se ve tentado a dejar la aventura ante los cientos de kilómetros que le quedan aún por recorrer. Hasta que, a mitad de libro, el autor consigue llegar a Oviedo, momento álgido del viaje, cuando el caminante sentirá su primera gran transformación dentro de sí mismo. La segunda parte del libro se abre a una dimensión espiritual, mística, cristiana.

La obra de Jean-Christophe Rufin es de una gran belleza. A la vez que recorre los lugares emblemáticos del Camino del Norte y nos habla de ellos, va introduciendo su experiencia vital. La mirada del francés nos hace seguir sus pasos, sus conocimientos, sus reflexiones y con él encontramos algunas de las respuestas que tendría más que un peregrino, un simple ser humano.