Poesía

Otras voces

2 enero, 2015 01:00

Agazapado bajo la máscara de filólogo, erudito y traductor, Luis Alberto de Cuenca (Madrid, 1950) oculta a uno de los más feroces letristas de la Movida, con canciones como "Viaje con nosotros", "Bésame, tonta", "Garras Humanas" y tantas otras que forman parte del imaginario sentimental de los 80. Ahora, Julio César Galán reúne todas sus letras y poemas relacionados con la música en Todas las canciones (Visor, 120 pp., 10 e.), un volumen que desvela esa veta desencantada de un poeta que no sólo se entrega a lo trascendente.

Irónico y trasgresor, Pedro Flores (Las Palmas de Gran Canaria, 1968) une sus versos a la voz de Andrés Molina, y al piano de Samuel Labrador en El hombre que bebió con Dylan Thomas (El Ángel Caído, 44 pp., 23 e.), un volumen que reúne treinta y seis de sus sonetos, un CD y un DVD, y en el que el poeta se cita con Huidobro, Vallejo ("No moriré en París con aguacero"), Neruda, Cervantes, Quevedo o el mismo Thomas para hablar de lo eterno, el amor, el desamor y la muerte.

Más de treinta años después del fallecimiento de Felipe Boso (1924-1983), Huerga & Fierro recupera su primer libro, T de Trama (72 p., 15 e.). Publicado en los años 70, es una auténtica declaración de princpios literarios que niega la poesía social entonces aún de moda, o el culturalismo de los novísimos, en una tercera vía experimental y visual sorprendente, pues supera el grafismo con inesperadas cargas de profundidad.