Neymar no se sale finalmente con la suya. El brasileño ha sido sancionado con tres partidos tras lo ocurrido frente al Málaga en la última jornada de Liga. El jugador del Barcelona fue expulsado a falta de 20 minutos por doble amarilla tras una dura entrada sobre Diego Llorente y de camino a los vestuarios, aplaudió en la cara del cuarto árbitro en un signo inequívoco de desprecio hacia el estamento arbitral, tal y como quedó reflejado en el acta del partido.

Tal y como se recoge en el artículo 117 del Código Disciplinario de la RFEF, este menosprecio puede ser castigado con dos o tres partidos, por lo que el brasileño ha recibido la mínima sanción, algo que no ha gustado en Barcelona. Tal y como desveló en exclusiva El Bernabéu, el equipo jurídico azulgrana ya trabaja para reducir la sanción a Neymar y agotarán todas las vías posibles para lograr que el carioca solo cumpla un partido de sanción.

En Barcelona ya están preparando el recurso que llevarán ante el Comité de Apelación, aunque tienen casi imposible lograr que Neymar pueda estar en el Santiago Bernabéu el próximo 23 de abril. Tal y como ha asegurado el propio Comité de Competición, el conjunto azulgrana ha sido incapaz de presentar ninguna prueba, "ni videográfica ni de ningún otro tipo" que apoye su versión de los hechos y desvirtúe el acta arbitral, por lo que no hay motivos para creer que Apelación vaya a darles la razón y deje sin castigo al brasileño.

LOS ANTECEDENTES SON CLAROS

Uno de los factores que juega en contra de Neymar son los anteriores casos que se han dado con este mismo patrón. Cristiano, Feghouli y hasta Ancelotti fueron sancionados por lo mismo, y los tres tuvieron que cumplir íntegramente la sanción impuesta, lo que facilita mucho las cosas a un Comité que no ha dudado en dejar retratado al Barcelona cuando le acusaron de haber cedido a las presiones mediáticas.