Asaja pide a la Junta que actúe ante una ley estatal que puede perjudicar a los ganaderos
La Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Castilla-La Mancha ha pedido a la Consejería de Agricultura que se acoja a las excepciones previstas en la normativa en relación a la aplicación de los purines y estiércoles sólidos para evitar "un considerable incremento de los costes de producción para agricultores y ganaderos, así como la imposición de multas y sanciones o recortes y pérdidas del importe de la Política Agrícola Común (PAC)".
La organización agraria ha explicado en nota de prensa que el Real Decreto 980/2017 recoge, en lo referente a las normas de la condicionalidad que deben cumplir los beneficiarios que reciban pagos directos, determinadas primas anuales de desarrollo rural o pagos en virtud de determinados programas de apoyo al sector vitivinícola, que la aplicación de purín en las superficies agrícolas no podrá realizarse mediante sistemas de plato o abanico ni cañones.
Sin embargo, Asaja ha detallado que la normativa nacional establece que las comunidades autónomas pueden aplicar excepciones, atendiendo a las características específicas de las superficies afectadas, incluidas las condiciones orográficas y climáticas, u otros motivos.
Del mismo modo, se establece el requisito de enterrar los estiércoles sólidos después de su aplicación en el menor plazo de tiempo posible, obligación que también se podrá exceptuar si la comunidad autónoma así lo determina, para los tipos de cultivo mediante siembra directa o mínimo laboreo, los pastos y cultivos permanentes y cuando la aportación del estiércol sólido se realice en cobertera con el cultivo ya instalado.
Para Asaja Castilla-La Mancha, la aplicación de este medida en la región, cuya entrada en vigor fue el 1 de enero de 2018, puede acarrear "importantes pérdidas económicas" para los agricultores y ganaderos de la región, por lo que ha instado a la Junta a que, al amparo de este Real Decreto, "establezca ambas excepciones" en la aplicación de la norma.