Las tormentas se van y ceden el protagonismo al sol y a las altas temperaturas
Tras dos semanas de fuertes tormentas y tiempo muy inestable, la bolsa de aire frío estancada sobre la península se empezará a diluir a partir de mañana para despedir mayo con la llegada de aire cálido que elevará las temperaturas hasta los 25-30 grados en puntos de la mitad sur.
La provincia de Tarragona está hoy en alerta naranja -riesgo importante- desde mediodía hasta las 18.00 horas, por lluvias y tormentas que podrían dejar hasta 40 litros por metro cuadrado en una hora en el litoral y prelitoral, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que mantiene el aviso amarillo en otras 16 provincias de 7 comunidades.
De momento, la Aemet no prevé alertas para mañana, aunque sí estará muy nuboso o cubierto en el tercio norte peninsular, con algunos chubascos, tormentas y granizo en zonas montañosas, más probables en la segunda mitad del día y que podrían afectar de forma más débil y dispersa a Galicia y puntos del interior.
El ascenso de los termómetros será generalizado en la península, pero se notará más en el interior de Andalucía y el bajo Ebro, mientras que en el extremo norte y ambos archipiélagos las temperaturas se mantendrán sin grandes cambios.
Así, las máximas rozarán los 30 grados en Córdoba y Sevilla, llegarán a los 27 en Badajoz, Granada y Huelva, se colocarán por encima de los 25 en el resto de Andalucía y Extremadura, amplias zonas de Levante y sur de Castilla-La Mancha y no bajarán de los 19 grados en ninguna provincia.
Las mínimas más bajas se darán en León, con ocho grados; en Lugo, Salamanca y Teruel, con 9, y en Ávila, Burgos, Cáceres, Granada, Soria y Zamora, con 10, mientras que en Canarias rozarán los 20 grados y en Málaga se quedarán en 18.
Las máximas suben hasta 5 grados
Estos valores suponen incrementos de hasta 5 grados en las máximas con respecto a las previsiones de hoy, en que el cielo nuboso y las tormentas que aún se esperan en toda la mitad norte de la península no permitirán a los termómetros subir por encima de los 25/26 grados.
Este ambiente fresco se ha observado principalmente en estaciones como La Covatilla (Salamanca), donde se registraron la pasada madrugada 1,9 grados centígrados, el Puerto de El Pico (Ávila), con 3,4 grados, o los 4,5 grados del madrileño Puerto de Navacerrada.
Según datos facilitados por la Agencia de Meteorología, las intensas tormentas caídas en las últimas horas han descargado 51,4 litros por metro cuadrado en la estación de Vinarós (Castellón), 24,8 litros en la Pinilla (Segovia) y los 20 litros del municipio de Rasquera (Tarragona).
Ayer, las intensas precipitaciones provocaron inundaciones y riadas en municipios como Motilla del Palancar (Cuenca), donde se recogieron 40 litros por metro cuadrado en una hora, o Hellín (Albacete), donde la fuerte tormenta de granizo provocó daños en la cubierta del hospital que obligaron a desalojar a los pacientes, aunque ya se ha recuperado la normalidad.
También en Albacete, los bomberos tuvieron que actuar para achicar agua en los municipios de Balazote y Lezuza, y en Salamanca se mantuvo la vigilancia después de que el lunes una tromba de agua inundara calles, garajes y locales comerciales y provocara la caída del falso techo de un gimnasio sin causar daños personales.
En el campo, el agua y el granizo han provocado cuantiosos daños, y así el Gobierno de Extremadura calcula que se perderán unos 600.000 jornales a causa de las tormentas registradas entre el 1 y el 24 de mayo en 32 localidades de la región.
La Aemet espera que el viernes sea un día de transición, con chubascos sólo en el extremo norte y noreste peninsulares, si bien la entrada de una nueva bolsa de aire frío por el oeste a última hora podría complicar el tiempo el fin de semana.