La ministra no puede ser más clara: "No se puede mantener un sistema de agua con trasvases"
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se ha referido al nuevo trasvase de 38 hectómetros cúbicos autorizado este miércoles asegurando que aunque "no está prohibido" se trata de un "recurso extraordinario destinado a momentos de necesidad". La ministra vuelve a usar las dos palabras mágicas -"recurso extraordinario"- que tanto éxito tuvieron en Castilla-La Mancha la primera vez que las pronunció. Lo que no han definido todavía es cuál es la medida de lo extraordinario.
En lo que sí ha sido clara la ministra durante su primera comparecencia ante la Comisión de Transición Ecológica del Congreso de los Diputados, es en considerar que "no se puede mantener un sistema de agua con trasvases".
Por eso, ha defendido que la interconexión local de las desaladoras es "una buena opción" si se contempla cada cuenca como un sistema. "Llevar agua desde Santiago de Compostela hasta Cádiz me parece absurdo", ha dicho.
En todo caso, considera que España tiene un "larguísimo recorrido por delante" para cumplir "mínimamente" con lo que dicta la Directiva Marco del agua y que "lo demás son lecturas malévolas".
La ministra ha insistido en que la política de agua es "extraordinariamente sensible, importante y estrategia" y considera que es "obvio" que hay que entender que es "imposible" basarla sobre la capacidad de garantizar tanta agua como se demande, sino que habrá que reordenar los recursos.
Ribera, a lo largo de su intervención, ha criticado la falta de información que se ha encontrado al llegar al Ministerio y ha lamentado que en muchos aspectos medioambientales el anterior equipo de Gobierno se ha dedicado a "esperar a que las cosas pasasen" o a "mirar para otro lado" en vez de afrontar los retos.