La Policía detiene a un toledano por inventarse un violento robo en las inmediaciones del hospital
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Toledo a una persona como presunta autora de una simulación de delito y estafa, después de que denunciara haber sido víctima de un robo con violencia que nunca ocurrió.
El detenido acudió a comisaría a denunciar que poco después de estacionar su vehículo en las inmediaciones del hospital Virgen de la Salud, había sido abordado por un desconocido que, a punta de navaja, le sustrajo una tableta, un portátil, dos teléfonos móviles, un reloj de pulsera y otros efectos personales.
Las pesquisas de los agentes condujeron a la detención de la presunta víctima, después de realizar una reconstrucción completa de los hechos que puso de manifiesto que los hechos denunciados no eran cierrtos y que en ningún momento había tenido lugar un robo con violencia, sino que los hechos habían sido inventados con el fin de dar parte al seguro.
Se trata de un delito tipificado en el Código Penal
Es necesario señalar una vez más que, simular ser víctima de una infracción penal, denunciar o acusar a otra persona de ser responsable de un hecho inexistente, es un delito tipificado en el artículo 457 del Código Penal. Además, acciones como esta provocan un retraso en la acción de la justicia y un serio menoscabo del correcto funcionamiento de los servicios policiales, con el consiguiente perjuicio para el ciudadano, dado que agentes que podrían estarse dedicando a la prevención de la delincuencia o a la investigación de otros hechos reales, se tienen que dedicar a realizar pesquisas sobre situaciones inexistentes.
Lamentablemente, este tipo de denuncias, como falsos robos con violencia o intimidación de teléfonos móviles, efectos electrónicos diversos o carteras, robos con fuerza en vehículos o locales, cada vez proliferan más, siendo el motivo más frecuente obtener una compensación por parte de los seguros aunque en muchas ocasiones, los objetivos son tan irrisorios como ocultar a la pareja el extravío de algún objeto o un gasto injustificado.