Imagen de archivo de un niño buscando comida en un vertedero.

Imagen de archivo de un niño buscando comida en un vertedero. iStock

Historias

La factura del hambre en el mundo: los que más recibieron no fueron los que más lo necesitaban

Un informe de Acción contra el Hambre revela que en 2022 más de la mitad de las necesidades financieras para erradicar el hambre no fueron cubiertas. 

23 febrero, 2023 03:33

Si el hambre está aumentando, ¿también lo hacen los esfuerzos financieros para su erradicación? Esta es la pregunta que se trata de responder en el nuevo informe, el 2023 Hunger Funding Gap Report, de la oenegé Acción contra el Hambre, que ha analizado la brecha entre las necesidades y la financiación en los 13 países donde más afecta el hambre.

“Nuestro equipo descubrió que los países con tasas de hambre más bajas recibían más fondos que los países que sufrían las peores crisis de hambre", declaró Ahmed Khalif, director de Acción contra el Hambre en Somalia. Los esfuerzos financieros deben escalarse para solventar el 53% de déficit de financiación contra el hambre en el mundo.

En 2022, solo el 3% de las necesidades de los programas de lucha contra el hambre se financiaron totalmente y más de la mitad de las necesidades financieras no fueron cubiertas. Este fue el caso de Afganistán y Haití, que recibieron menos ayuda en proporción con lo que requerían para afrontar las crisis. 

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"El hambre es un problema complejo y la financiación es solo una parte de lo que se necesita para acabar con el hambre en nuestras vidas. Pero sabemos que cerrar la brecha de financiación contra el hambre es un paso fundamental", ha declarado Eric Bebernitz, director de Relaciones Externas de Acción contra el Hambre.

Los responsables de las agencias de Naciones Unidas en la vanguardia de la lucha contra el hambre mundial expresaron en un comunicado conjunto que hay que tomar medidas urgentes. Y tres de las principales oenegés con el mismo objetivo, el Comité Internacional de Rescate, World Vision y Acción contra el Hambre, han realizado un llamamiento a la comunidad internacional para dar una respuesta suficiente antes del desastre. "Todavía hay una ventana de oportunidad para salvar cientos de miles de vidas", señalaron. 

Y esto empieza por atender los "focos de hambre". Entre octubre del año pasado y enero, la FAO ha identificado hasta 19 países donde existe mayor incidencia: Afganistán, Etiopía, Nigeria, Sudán del Sur, Somalia y Yemen son los peor parados. 

La factura del hambre, es decir, el dinero para poder hacer frente a este problema crónico, es alta. Según Oxfam, se necesitaría invertir cada año alrededor de 37.000 millones de dólares hasta 2030 para erradicar la desnutrición. Pero la solución no pasa solamente por inyectar dinero en forma de ayuda financiera para programas de resiliencia alimentaria, hay otras causas profundas, como los conflictos, que el dinero no puede solventar. 

828 millones de personas

El hambre continúa creciendo. Los últimos datos de las Naciones Unidas sobre este problema alertan que entre 702 y 828 millones de personas —una de cada diez en el mundo— están afectadas por el hambre. A este paso, y de acuerdo con las predicciones de la FAO, no se lograría cumplir el objetivo Hambre Cero para 2030. 

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Pero, ¿qué es el hambre? Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) se trata de una sensación física, incómoda o dolorosa, causada por un consumo insuficiente de energía alimentaria. Desde hace décadas, la FAO identifica el hambre con la desnutrición. 

Las crisis más agudas se están sufriendo en Asia del Sur —425 millones de personas— y África Subsahariana —279 millones de personas—, donde los avances se han estancado. Las causas del hambre en el mundo son diversas y a menudo se solapan, agravan la situación y colocan a algunos países en laberintos para los que ni siquiera se puede atisbar la salida. Estos son los principales factores que perpetúan la desnutrición

1. Conflictos

Las guerras siguen siendo la principal causa del hambre. Según el Informe Mundial sobre las Crisis Alimentarias 2022, elaborado por el Programa Mundial de Alimentos (PMA), los conflictos y la inseguridad fueron los principales causantes de la inseguridad alimentaria aguda en 2021. Además, más de la mitad de la población que padece hambre vive en zonas asoladas por la guerra y donde la violencia es habitual.

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La guerra en Ucrania ha sido un ejemplo más de cómo el conflicto alimenta el hambre, forzando a las personas a abandonar sus hogares para salvaguardarse. Y con una externalidad adicional: la contracción de las exportaciones de grano de Ucrania ha provocado una subida generalizada de los precios de los alimentos, los combustibles y los fertilizantes.

2. Pobreza

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), a medida que disminuye el nivel de ingresos de un país, suele aumentar la prevalencia de la inseguridad alimentaria. 

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Algunas oenegés internacionales, como World Vision, recalcan que la pobreza es la causa principal del hambre en el mundo. "La desigual distribución de la renta y la falta de recursos en los países en desarrollo hacen que millones de personas simplemente no puedan permitirse la tierra o los suministros agrícolas que necesitan para cultivar o acceder a alimentos nutritivos".

3. Aumento de los precios de los fertilizantes

Los precios mundiales de los fertilizantes han subido incluso más deprisa que los de los alimentos, que se mantienen a su vez en máximos de diez años. Los efectos de la guerra en Ucrania, incluido el aumento de los precios del gas natural, han perturbado aún más la producción y las exportaciones mundiales de fertilizantes.

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Además, se ha reducido el suministro y se han encarecido los precios, amenazando con reducir las cosechas. La crisis de asequibilidad de los alimentos podría degenerar en una crisis de disponibilidad, con un descenso de la producción de maíz, arroz, soja y trigo en 2022.

4. Cambio climático

La crisis climática es una de las principales causas del fuerte aumento del hambre en el mundo. Las crisis climáticas destruyen vidas, cosechas y medios de subsistencia, socavando la capacidad de las personas para alimentarse. Las proyecciones del IPCC apuntan a que el cambio climático se convertirá en el futuro en un factor clave que impedirá acabar con el hambre

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El cambio climático inducido por el ser humano está provocando fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes e intensos, lo que tiene efectos adversos generalizados para la naturaleza y las personas. El cambio climático está ejerciendo presión sobre la agricultura, la silvicultura, la pesca y la acuicultura, obstaculizando cada vez más los esfuerzos para satisfacer las necesidades humanas.

5. Fenómenos climatológicos extremos

Los fenómenos climatológicos extremos, como las sequías y las inundaciones, son cada vez más frecuentes. Y ponen en riesgo las cadenas de distribución de alimentos, sobre todo en países en vías de desarrollo.

Según el informe Hambre y Calentamiento Global, publicado en septiembre del año pasado, diez de los 'puntos críticos' más afectados por el cambio climático del mundo han sufrido un aumento del 123% del hambre aguda solo en los últimos seis años.

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Como lee el informe, "el agravamiento de estos nuevos fenómenos meteorológicos, cada vez más extremos, está reduciendo la capacidad de las personas pobres, especialmente de las que viven en países de renta baja, para escapar del hambre y hacer frente a la siguiente crisis". 

La tasa de subalimentación no ha hecho más que aumentar en los últimos años: ha pasado del 8% en 2015 al 9,8% en 2021. Y según las proyecciones del Índice Global del Hambre, el mundo en su conjunto, y al menos 46 países, no lograrán alcanzar ni siquiera un nivel bajo de hambre en 2030