Cuando en el año 2015 se acordaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) no sabíamos cómo de relevantes se volverían para nuestra vida en la primavera de 2020. Todos teníamos la percepción de que el de los ODS era un acuerdo histórico, pero la pandemia nos ha marcado, a fuego, una certeza: en el cumplimiento de estos 17 objetivos nos va la vida.
La covid ha puesto sobre la mesa la relación directa y evidente entre la mala salud del planeta y el empeoramiento de la nuestra. Tras estos meses, la lucha por alcanzar estos objetivos representa el mayor desafío al que nos enfrentamos como sociedad.
Los ODS constituyen la agenda de nuestras urgencias, los grandes retos del mundo. Cada uno de ellos, desglosado en diversas metas para los próximos quince años, nos indica el marco en el que actuar. Allí donde podamos contribuir, lo haremos. Como grupo especialista en salud, es en el ODS 3 (salud y bienestar) donde mayor impacto positivo podemos crear.
La pandemia nos ha marcado a fuego una certeza: en el cumplimiento de los ODS nos va la vida
Y One Health es el enfoque de salud que hemos adoptado para contribuir de forma más efectiva no solo a este objetivo, sino -de forma directa o indirecta- a todos los demás. Porque la salud es el fundamento para el desarrollo económico saludable, sostenible e inclusivo.
Los ODS están agrupados en tres niveles: medioambiental (6, 13, 14 y 15), social (1, 2, 3, 4, 7, 11 y 16) y económico (8, 9, 10, 12); todos, interdependientes unos de otros. La salud está en el medio: garantizarla requiere un entorno natural limpio, saludable y sostenible, y a su vez constituye la base para el desarrollo económico.
Como decía, estoy absolutamente convencido de que para cuidar la salud de las personas es imprescindible cuidar también la del planeta. Como reza el enfoque One Health que propone la Organización Mundial de la Salud: personas y planeta, una misma salud.
Dicho de otra manera, desde Bupa, compañía internacional especialista en el cuidado de la salud de las personas, no podremos hacer nuestro trabajo si no nos comprometemos a generar un entorno saludable que prevenga la próxima pandemia y las siguientes. La ciencia ya nos ha confirmado que la degradación de la diversidad biológica nos expone en grado sumo a los brotes infecciosos. La covid solo ha sido la pandemia más reciente, pero habrá otras.
Y abordar los retos globales va a requerir el trabajo de las empresas. No podemos esperar a que los gobiernos nos digan qué tenemos que hacer. Hemos de tomar el liderazgo y ser los abanderados de una nueva economía y sociedad. Para lograrlo, las herramientas digitales son cruciales, más si cabe en el ámbito de la salud.
La digitalización va a acelerar el avance hacia un sistema económico mundial más sostenible. Así que tenemos una oportunidad de oro: la digitalización y la sostenibilidad son los fundamentos sobre los que vamos a reconstruir nuestra economía y generar empleo y oportunidades de prosperidad.
La salud es el fundamento para el desarrollo económico saludable, sostenible e inclusivo
Desde Bupa abrazamos la idea de mitigar nuestro impacto negativo sobre el entorno, pero también de generar impactos positivos en los entornos en los que operamos. Por eso, ya en 2014 establecimos un fondo de inversión de 50 millones de libras (más de 58 millones de euros) para reducir nuestra huella de CO₂ y continuamos invirtiendo anualmente entre un 1% y un 2% del CapEx en eficiencia energética.
Como seguimos avanzando para hacer la transición hacia una economía descarbonizada, nos hemos unido a la Science Based Targets Initiative (SBTi). Esta reúne a más de mil compañías de todo el mundo que se comprometen a reducir sus emisiones en línea con la ciencia sobre el clima para lograr el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento mundial a 1,5 grados centígrados frente a niveles preindustriales.
Esto supone que nuestro grupo reducirá de forma drástica nuestra huella de carbono antes de 2030, y aspiramos a convertirnos en una compañía NetZero (cero emisiones) de forma global. Estamos consumiendo de forma mayoritaria energía renovable.
De hecho, el 100% de la electricidad que empleamos en países como España o Reino Unido proviene de fuentes renovables y contamos con instalaciones de paneles fotovoltaicos para generar energía solar en nuestras residencias en España, Reino Unido, Nueva Zelanda y Australia.
Además, es importante destacar que apostamos también por la arquitectura sostenible. Nuestra sede de Sanitas en Madrid es la primera edificación con certificación LEED (Leadership in Energy and Environmental) en nuestro país. Además, fue el primer edificio no residencial en España en obtener el certificado BREEAM® (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodology), que es el método de evaluación y certificación de la sostenibilidad en la edificación técnicamente más avanzado. En Reino Unido, en 2018 la sede de Bupa en Mánchester se certificó como healthy workplace (lugar de trabajo saludable) por Fitwell.
Adicionalmente, en Sanitas estamos construyendo un viaje del cliente saludable y sostenible: revisamos todos los puntos de contacto de los clientes con nosotros para neutralizar sus impactos negativos. ¿Cómo? Digitalizándolos.
La covid solo ha sido la pandemia más reciente, pero habrá otras
Así, hemos lanzado la Videoconsulta Cero Emisiones: cuando un cliente accede a una videoconsulta o se baja una receta o un informe médico a través de nuestra app, se le informa de las emisiones de CO₂ que ha evitado al no desplazarse. No solo hacemos la medicina más accesible, sino también más sostenible.
Nuevos hábitos
Por otro lado, las ciudades en las que vivimos deben promover la salud de sus habitantes y la resiliencia ante pandemias. En todo Bupa, y por supuesto aquí en España a través de Sanitas, estamos trabajando para que nuestras ciudades sean entornos más saludables en los que las personas puedan disfrutar de vidas más largas, más sanas y felices, mientras creamos un mundo mejor.
Para esto, creamos hace ya más de cinco años el proyecto Healthy Cities by Sanitas, que contribuye a varios ODS (3 -salud y bienestar-; 11 -ciudades y comunidades sostenibles-; 13 -acción por el clima-; y 17 -alianzas para lograr objetivos). Se trata de una iniciativa a la que, a través de una plataforma online, en 2021 se han sumado 80 compañías para fomentar hábitos de vida saludables entre sus 250.000 empleados.
A cambio, en cada edición, invertimos en crear o regenerar infraestructura verde urbana en distintas ciudades, como la plantación que hizo Sanitas para el Bosque Metropolitano de Madrid.
Estos son solo algunos ejemplos de lo que las empresas, como agentes sociales, podemos hacer por todos los ciudadanos. Además de todos los recursos y proyectos, Bupa cuenta con más de 84.000 empleados en todo el mundo. Si conseguimos concienciar a todos ellos de la importancia de trabajar en comunidad por los ODS, estaremos aportando una fuerza de cambio arrolladora.
Ahora es el momento. Somos la última generación que puede hacer algo para frenar los efectos del cambio climático que empeora a ojos vista nuestra salud. No debemos vacilar. Toca actuar, juntos. Bupa y todos los que en ella trabajamos sabemos que este es el camino, nuestros objetivos están claros y hemos de aunar fuerzas entre los gobiernos, las empresas, la sociedad civil y las personas.
***Iñaki Ereño es CEO del Grupo Bupa.