Sánchez celebra la bronca interna del independentismo y se apunta el tanto
- Fuentes del Gobierno atribuyen la descomposición de la estrategia conjunta de Junts per Catalunya y ERC al diálogo iniciado por Sánchez.
- El Ejecutivo se felicita por que la situación en Cataluña es mejor que hace un año.
- El separatismo no logra reprobar al Rey en el Parlament por la guerra civil entre ERC y JxCat.
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El Gobierno cree que la división de los partidos independentistas, agudizada en las últimas semanas en el Parlament de Cataluña, es una buena noticia. Así lo han asegurado este martes fuentes cercanas a Pedro Sánchez al hilo de su reunión con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, tras la que ambos mandatarios han ofrecido una rueda de prensa.
"Algo estará haciendo el Gobierno" para que se haya roto la unidad de acción que hasta ahora mostraban, ante temas fundamentales, Junts per Catalunya y ERC, los dos partidos que además comparten el Govern de la Generalitat, según estas fuentes.
Ese cisma se ha materializado en las fuertes discusiones entre JxCat y ERC sobre la sustitución de diputados suspendidos por el Tribunal Supremo, que ha llevado a los partidos independentistas a perder varias votaciones en el Parlament, entre ellas la de la reprobación del rey Felipe VI y la que reclamaba de nuevo la autodeterminación.
Moncloa celebra que la situación es mejor que la de hace un año, cuando se celebró un pretendido referéndum de autodeterminación suspendido por el Tribunal Constitucional.
Entonces, Cataluña vivía momentos convulsos. Carles Puigdemont, hoy huido de la Justicia española en Bélgica, estaba a punto de declarar la independencia en un discurso en el Parlament, aunque sólo fuese durante ocho segundos de vigencia. Días más tarde, la cámara autonómica declaró con una moción solemne la autodeterminación en base a los resultados del 1-O y el Gobierno de Mariano Rajoy activó las medidas del artículo 155 de la Constitución.
Sánchez cree que, gracias a los esfuerzos por el diálogo del Gobierno, la situación es positiva, las reuniones se suceden pese a algunas palabras más altas que otras y el riesgo de una separación de Cataluña del resto de España es bajo. Y pese a eso, la oposición reclama elecciones, ironizan las mismas fuentes.
Sánchez quiere que "de una vez por todas, el diálogo y la legalidad se materialicen en Cataluña, se abran camino", según ha dicho él mismo durante la rueda de prensa.