Torra redobla el desafío al Estado volviendo a colgar la pancarta por la "libertad de los presos"

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ha vuelto a colgar la pancarta de "Libertad para los presos políticos", junto con el lazo amarillo, en el balcón de la Generalitat. La Junta Electoral Central había obligado al Gobierno de la Generalitat a quitar la pancarta durante la campaña, exigencia que el Gobierno de Torra cumplió.

Una vez pasadas las elecciones, Torra volvió a colgar la pancarta, redoblando el desafío al Estado. La Junta Electoral Central (JEC) había requerido a Quim Torra la retirada de la pancarta con el lazo amarillo para preservar la neutralidad de las instituciones durante el periodo electoral y el líder del Ejecutivo pidió un informe al Síndic de Greuges sobre despejar de símbolos los edificios públicos.

Tras el informe del Síndic que recomendaba retirarlos, trabajadores de la Generalitat cubrieron la pancarta del lazo amarillo por otra con un lazo blanco atravesada por una franja roja y, en un acto ese mismo jueves, Torra aseguró que defendería hasta las "últimas consecuencias" derechos como el de la libertad de expresión, de manifestación y a la autodeterminación de Cataluña.

Los funcionarios también retiraron una pequeña pancarta colgada en una de las ventanas del Palau junto al balcón con el lema 'Libertad de expresión' y la característica careta con la franja roja cruzando la boca de la máscara.

Ahora, pasado el periodo electoral, la pancarta vuelve a estar colgada en el balcón de la Generalitat.