¿Más España o más Europa? Un 38% daría más competencias a la UE; un 23% le daría menos

Los españoles son desde su adhesión en 1986 a la entonces Comunidad Económica Europea (CEE) los más entusiastas del club que hoy se llama Unión Europea. La modernización radical que llegó con los Fondos de Cohesión, los de Desarrollo Regional; las ventajas de la libertad de movimientos de personas, mercancías y bienes; la integración económica con la llegada del euro; los programas Erasmus; el fin del 'roaming'... y ahora, tras la pandemia, la inmensa inyección de los Fondos de Recuperación son sólo algunos ejemplos de lo que significa, en el día a día, ser europeo.

Con sus rencillas tradicionales y sus frenos burocráticos, la Unión Europea es una historia de éxito que ha producido los primeros 75 años de paz perpetua en el continente desde que hay registros históricos. Y los ciudadanos de nuestro país, en su mayoría, han percibido la convergencia, no sólo socioeconómica sino también emocional, con un continente con el que vivieron muchos años de espaldas.

Por eso, según el sondeo de SocioMétrica para EL ESPAÑOL, son muy pocos los españoles que querrían recortarle poderes a la UE (22,8%). Son muchos más (38,1%), casi el doble, los que apoyarían que el reparto de soberanía entre España y la Unión Europea entregara "más competencias que ahora" a Europa. En el punto intermedio, satisfechos con la situación actual, se sitúa algo más de la cuarta parte de los encuestados (28,5%).

Lo cierto es que las instituciones europeas son utilizadas como excusa perfecta para los gobiernos que las integran. Todo lo bueno que viene del trabajo conjunto y fortalecido de los Estados miembros se lo apuntan Ejecutivos nacionales, como la exitosa campaña de vacunación contra el coronavirus.

Y todo lo malo se achaca a Europa, como la incapacidad del Consejo de Ministros de Pedro Sánchez para contener el alza imparable de los precios de la electricidad: "Hemos enviado una carta a Bruselas pidiendo reformar el mercado eléctrico", alega el Gobierno. Quizás eso aplicado durante ya 35 años explique la poca diferencia que se aprecia en las opiniones de los españoles según su edad.

Tampoco se aprecian distinciones muy reseñables -o conclusiones claras- en las respuestas dadas por los habitantes de las distintas Comunidades Autónomas.

La región más partidaria de entregarle más poder a la UE es Baleares (49,7%), seguida muy de cerca de otras autonomías con partidos nacionalistas poderosos, como Cataluña (44,5%) o País Vasco (43,6%) y Navarra (42,1%). Pero una proporción similar se aprecia en regiones tan poco sospechosas de ese sesgo como Castilla y León (45,1%), la Comunidad de Madrid (42,4%), o Castilla-La Mancha (42,3%).

Las opiniones en comunidad castellano-manchega están muy divididas, porque es precisamente la que mayor porcentaje presenta de quienes querrían reducirle poderes a la UE (30,6%), y sólo los canarios (29,2%) se acercan. El resto de regiones rondan proporciones del 20%.  

Recuerdo de voto

Lo cierto es que las funciones del Parlamento Europeo, la Comisión Europea y el Consejo Europeo son confundidas adrede por los sucesivos inquilinos de la Moncloa con el término genérico "Bruselas".

Y es cuando se entra en estos detalles, en la política, cuando ya sí se pueden advertir opiniones divergentes, al clasificar a los encuestados según su recuerdo de voto. Así, son los seguidores de Vox los menos entusiastas con la UE, con la menor cantidad de respuestas a favor de entregar más soberanía a Europa (26,8%) y la mayor proporción de los que le retiraría competencias a la Unión (48,2%).

A los ciudadanos les cuesta entender que sus únicos representantes directos son los eurodiputados; que lo que preside Ursula von der Leyen es algo parecido a un gobierno de Europa; y que el Consejo de jefes de Estado y de Gobierno que lidera Charles Michel es una especie de cámara de los lores con la última palabra sobre casi todo.

Tal vez ésa sea la razón que explique respuestas tan repartidas, con un alto porcentaje de encuestados que o no saben o no contestan (10,6% general), y sobre todo tan ideologizadas, en estas preguntas relacionadas con la soberanía. Más de la mitad de los votantes de Unidas Podemos (53,5%) daría más competencias a las instituciones europeas, con los seguidores de Ciudadanos (49,6%) y PSOE (47,7%) muy cerca. 

Los simpatizantes del PP, sin embargo, responden a esa definición casi contradictoria que hace del partido su líder, Pablo Casado, "conservador reformista". Son mayoritariamente lo primero y prefieren dejarlo todo como está en un 39,4%, pero casi la misma cantidad de votantes populares (37,4%) le daría más competencias a la UE.

Si pasamos a los detalles de lo que significa ser europeo, uno de los detalles que más acercaría a los 450 millones de ciudadanos de la UE sería la unión fiscal. Hasta ahora, un tabú que ni siquiera se abordó en lo peor de la crisis de 2008, cuyo origen fue financiero y una de cuyas consecuencias directas fue evidenciar el problema de tener una moneda única sin convergencia en las políticas fiscales de sus integrantes.

Según los datos del sondeo, los españoles estamos mayoritariamente a favor de "que se paguen los mismos impuestos en todos los países de la UE". Así responde un 58,6% de los encuestados, el doble de los que se muestran en contra (29%).

En este asunto también hay menos diferencias sesgando por las edades de los encuestados que por su lugar de residencia. Sí es ligeramente creciente con la edad el apoyo a la convergencia tributaria, pero sobre todo hay una gran distancia entre el 79,2% de catalanes partidarios de que todos los ciudadanos de la UE paguen los mismos impuestos frente al 41,8% de los castellano-manchegos, que opina exactamente lo contrario.

Por recuerdo de voto, se aprecia más europeísmo fiscal, de nuevo, en los votantes de Unidas Podemos (68,5%) y del PSOE (67,9%). También los seguidores de partidos nacionalistas son abrumadoramente partidarios (70%) de que la UE equipare los impuestos de todos sus Estados miembros.

Tiene sentido si se tiene en cuenta que las encuestas se han realizado a principios de octubre, cuando más en boga estaba el debate de "equiparar el impuesto de sociedades al mínimo del 15% en toda Europa". Una medida finalmente acordada por las dos formaciones del Gobierno de coalición... apoyadas por los independentistas en el Congreso. Algo de eso habrá cuando un 39,5% de los votantes del PP y un 36,7% de los de Vox rechazan la medida.

Otro de los desafíos que se han abierto paso en el debate público en las últimas fechas es la falta de una política exterior y de seguridad común entre los Veintisiete. Lo lamentó públicamente el Alto Representante, Josep Borrell, durante la reciente crisis de Afganistán. Los españoles están a favor de dar este paso de un modo muy mayoritario. Hasta el 74,3% querría "una única política exterior que determinara la de los estados miembros". Y sólo el 15,1% la rechaza. 

El Gobierno español es uno de los más firmes partidarios de avanzar en este sentido. No en vano, y tal como adelantó este periódico, Pedro Sánchez ya ha lanzado la idea de crear una Unidad Militar de Emergencias (UME) a la europea, y la semana pasada introdujo el tema del "ejército europeo" en su reunión con el secretario general de la OTAN.

Eso explicaría que sus votantes estén más alineados con los del centro derecha en este asunto que con los aliados de la coalición. Los simpatizantes del PSOE apoyan una política exterior común en la UE en un 83,8%, más incluso que los seguidores del PP (80,8%) y cerca de los tradicionalmente más europeístas de Ciudadanos (89,7%). Curiosamente, los votantes de Unidas Podemos (63,9%) tienen una posición más cercana a los de Vox (65,3%).

Ficha técnica

Se han completado 3.160 encuestas en toda España, con un mínimo de n=100 en cada CCAA exceptuando Ceuta y Melilla, mediante panel propio de Sociometrica y plataforma de gestión Gandia Integra, entre el 4 y el 7 de octubre de 2021. La muestra se pondera por censo autonómico, sexo, edad, situación laboral, nivel de estudios, y recuerdo de voto en las elecciones del 10-N. Al tratarse de un muestreo no probabilístico no hay error muestral, sino máxima convergencia por interacción, que es del 97%. Sociométrica es socio de Insights + Analytics España, rama empresas, asociación de Data Science que integra a Aneimo y Aedemo.