José Manuel Albares en Kiev acompañado por su homólogo, Dmitry Kuleba.

José Manuel Albares en Kiev acompañado por su homólogo, Dmitry Kuleba. Ministerio de Exteriores

Política CRISIS EN UCRANIA

Albares inicia en Kiev en una 'gira por la paz' que le llevará a Lyon y Bruselas en 24 horas

Admite que la situación es "muy grave y peligrosa", pero el escenario aún es el del diálogo. "No queremos inquietar y angustiar" a la población.

9 febrero, 2022 02:29

La Unión Europea no contempla la guerra "ni como hipótesis". José Manuel Albares, ministro español de Asuntos Exteriores, viajó este martes en la tarde-noche a Kiev, invitado por su homólogo ucraniano, Dmytro Kuleba, como inicio de una "gira por la paz" que lo llevará el jueves a Bruselas, con escala previa en Lyon (Francia).

En estas ciudades mantendrá, al menos, cuatro entrevistas bilaterales enmarcadas en el despliegue de "diplomacia de alta intensidad" de los socios de la Unión Europea y los aliados de la OTAN. Albares habló la semana pasada con su homólogo ucraniano, en una llamada en la que ofreció el apoyo español ante la amenaza bélica de Rusia. En ese telefonazo, Kuleba pidió a Albares que visitara la capital ucraniana tan pronto como tuviera ocasión, según confirmaron fuentes diplomáticas, para visibilizar el apoyo de las democracias occidentales a su país.

Aparte del encuentro con su homólogo en Kiev, el jefe de la diplomacia expresará la "solidaridad española" con Ucrania con una ofrenda floral en el monumento a los caídos por la patria. Según fuentes del Gobierno ucraniano, las partes también discutirán el aumento del comercio y la inversión entre ambos países. Kuleba y Albares darán una conferencia de prensa en línea conjunta. Además, Exteriores buscaba huecos en la agenda para una reunión "al más alto nivel" de Albares y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

José Manuel Albares en Kiev junto a su homólogo, Dmitry Kuleba, en una ofrenda floral.

José Manuel Albares en Kiev junto a su homólogo, Dmitry Kuleba, en una ofrenda floral. Ministerio de Exteriores

Precisamente con Zelenski se reunió este martes el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, un día después de visitar Moscú y ser recibido en el Kremlin por el mandatario ruso, Vladímir Putin. En la tarde del miércoles, ya en Lyon y en los márgenes de la reunión informal de ministros de Exteriores de la UE, Albares ha cerrado un encuentro con su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian.

En esa cita, Albares y Le Drian intercambiarán información de los respectivos esfuerzos de cada país la resolución de una crisis que está dejando a la vista las dificultades de la Unión Europea para hablar con una sola voz, ni siquiera coordinada.

(Des)unión Europea

Ésa es una de las intenciones de Putin, dividir a la UE, atrayendo a algunos de sus miembros, como la Hungría de Viktor Orbán, negando la legitimidad de la Comisión Europea como interlocutor, y amenazando a otros con cortes en el suministro energético.

De ahí que la imagen Macron en Moscú, el mismo día en el que el canciller alemán, Olaf Scholz, se reunía con Joe Biden en la Casa Blanca, y ambos con fondos de mensaje muy distintos, ha abundado en que una de las conclusiones de estas últimas semanas es la necesidad de una urgente política exterior común.

El presidente ruso, Vladímir Putin, se reúne con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, en Moscú

El presidente ruso, Vladímir Putin, se reúne con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, en Moscú Reuters

No es ése el objetivo de Albares en esta gira, sin duda más centrada en lo urgente que en lo importante, pero el ministro español sí quiere seguir poniendo los cimientos del empeño de España ante el resto de Estados miembros de la Unión. Como deslizó Pedro Sánchez en los Consejos Europeos que siguieron a la evacuación de Kabul, Madrid trabaja por el éxito del proyecto de Brújula estratégica y por un embrión efectivo de un ejército europeo.

De hecho, al día siguiente, ya el jueves, Albares viajará a Bruselas. En la capital belga, el ministro español se reunirá con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y con el Alto Representante de la UE, Josep Borrell. Según fuentes de Exteriores, con ambos repasará los avances de sus contactos en Ucrania, y "sumará esfuerzos" para que "el diálogo sea el que triunfe definitivamente" en la crisis con Moscú.

La escalada militar de Rusia en las fronteras de Ucrania ha provocado una enorme crisis en la que fuentes de la diplomacia española lamentan la falta de protagonismo de Borrell. Él mismo ya anticipó la situación hace meses, advirtiendo de la necesidad de que la UE se dotara de "una fuerza militar propia", necesaria para desarrollar "una voz única" en el mundo.

"Nadie prepara una guerra"

Recientemente, el Alto Representante -y también exministro de Exteriores de Sánchez, en su primera etapa- expresó su poca capacidad de iniciativa con diplomacia: "Mi labor tiene límites, debo ser la voz de todos y coordinar". Según su entorno, la visita de Macron a Moscú y Kiev de estos días se explica no tanto por un empeño personal en liderar la UE -tras la salida de Angela Merkel- ni en su carrera nacional por la reelección, sino en su condición de presidente de turno del Consejo.

Josep Borrell, Alto representante de la UE, con Antony Blinken, secretario de Estado de EEUU, en Washington.

Josep Borrell, Alto representante de la UE, con Antony Blinken, secretario de Estado de EEUU, en Washington. Efe

A pesar de que en el entorno de Moncloa se siguen contemplando todos los planes de contingencia, y el entorno del presidente no descarta un recrudecimiento de la situación en las próximas semanas, Albares insistió en que "nadie se está preparando para una guerra. El fondo de mi viaje a Kiev es que sean el diálogo y la diplomacia los que resuelvan cualquier controversia".

Exteriores señala como "muy importante" remarcar que, aunque la situación es "muy grave y peligrosa", el escenario sigue siendo el del diálogo. "No queremos inquietar y angustiar" a la población, enfatizó el ministro español. "Está abierta la vía del diálogo, en el consejo OTAN-Rusia, en el seno de la OSCE, y en las reuniones bilaterales de estos días, como la que tuve con el secretario Antony Blinken, de EEUU, o las de estos días en Kiev, Lyon y Bruselas".

El mismo Albares remarcó antes de coger el avión, en un encuentro con periodistas, que "la clave es que somos los ministros de Exteriores los que pilotamos los trabajos". Es decir, que el escenario bélico no está sobre la mesa. Y aunque entre "las cuatro D" que no deja de repetir Albares, después del "diálogo", la "diplomacia" y la "desescalada", la cuarta es la de "disuasión", ésta en realidad opera como contraestímulo para que Putin opte por rebajar tensiones.