ERC, Bildu y BNG avanzan en su alianza estratégica frente a Pedro Sánchez y Yolanda Díaz
El arranque de la plataforma de la vicepresidenta lleva a algunos de los nacionalistas a acelerar su colaboración para defenderse electoralmente.
20 mayo, 2022 03:07Noticias relacionadas
ERC, Bildu y BNG, los tres partidos independentistas de izquierdas del Congreso, avanzan desde hace meses en un proyecto de futura alianza estratégica, que ya empieza a tener plasmación concreta en la coordinación en el día a día parlamentario.
El objetivo es, por un lado, fortalecer su posición en las negociaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez y, por otro, prepararse para hacer frente electoralmente a la plataforma de izquierdas que promueve Yolanda Díaz.
De hecho, algunos de estos partidos pretenden acelerar su estrategia coincidiendo con la puesta en marcha de la plataforma de la vicepresidenta, lo que ella llama “proceso de escucha”.
El éxito de Yolanda Díaz es imprescindible para Sánchez, porque es la única forma de que pueda sumar escaños suficientes para gobernar tras las generales previstas para finales de 2023.
Ninguno de ellos quiere acabar con el Gobierno de coalición, entre otras cosas, porque la alternativa de victoria de PP y Vox es mucho peor para ellos.
Fuentes de estos partidos explican que ha aumentado notablemente el número de iniciativas conjuntas presentadas en el Congreso, además de mantener una colaboración directa. Cada partido tiene, obviamente, autonomía para decidir el sentido de sus votaciones en la Cámara, pero con el compromiso de comunicación mutua de ese tipo de decisiones.
Significativamente, han actuado coordinadamente frente a iniciativas patrocinadas por la vicepresidenta segunda. Por ejemplo, el pasado 13 de mayo, los tres partidos presentaron una proposición de ley conjunta para derogar los artículos de la reforma laboral que quedaron “vivos” después de la modificación aprobada en el Congreso y promovida por Yolanda Díaz. Cuando se debata, pretenden poner a los dos partidos del Gobierno de coalición en la tesitura de tener que pronunciarse sobre puntos como el de los despidos.
Los tres partidos, además, votaron en febrero en contra de la convalidación de decreto de reforma laboral promovido por Yolanda Díaz. Aquel texto salió adelante sólo porque un diputado del PP -Ángel Casero- se equivocó al emitir el voto telemático.
Más recientemente, ERC se opuso a la convalidación del decreto con medidas económicas para hacer frente a los efectos de la guerra, mientras que Bildu y BNG votaron a favor y salvaron el texto. Pero incluso en esa votación los tres partidos coordinaron su posición mientras negociaban por separado con el Gobierno. Eso les permite, por ejemplo, conocer si pese a su rechazo estratégico, una iniciativa del Ejecutivo puede salir adelante con el voto de los otros partidos.
Uno de los objetivos es, precisamente, fortalecerse frente al Ejecutivo. Lo han hecho también en las últimas semanas en las actuaciones sobre el espionaje, por ejemplo, en la presentación de iniciativas concretas como las peticiones de comisiones de investigación sobre Pegasus. También en la “detección o denuncia” de propuestas del Gobierno que puedan afectar a competencias de las comunidades autónomas.
PNV, PdCat y Junts han participado en algunas de esas iniciativas, pero no en todas. Y Unidas Podemos se ha sumado a algunas de ellas.
Acuerdo "muy verde"
De cara al futuro, alguno de los partidos explica que la iniciativa está aún “muy verde”, entre otras cosas porque encuentra muchas reticencias en el interior de sus formaciones políticas.
Tiene más apoyo en las direcciones de los grupos parlamentarios de ERC y Bildu. Por ejemplo, fuentes próximas a Gabriel Rufián, portavoz de ERC, aseguran que él sí lo ve claro.
A los tres partidos les une también algo que puede funcionar como pegamento para adoptar en el futuro iniciativas comunes: el temor a que la plataforma de Yolanda Díaz les dañe electoralmente en sus respectivos territorios. Explican que esa coordinación es la única manera de confrontar con Díaz.
El avance de Podemos en su momento en el País Vasco fue a costa de Bildu, llegando a convertirse en las elecciones generales de 2016 en el primer partido. También lograron magníficos resultados en Cataluña, como una de las confluencias de Podemos. Algo parecido ocurrió inicialmente en Galicia con En Marea, aunque en las tres comunidades Unidas Podemos y sus confluencias han caído espectacularmente en las últimas elecciones.
Ahora, la plataforma de Yolanda Díaz -inicialmente llamada Sumar- podría amenazar de nuevo a ERC, Bildu y BNG en sus comunidades en las generales de 2023 y, por eso, han hablado de cómo colaborar para evitarlo y hacer frente a su candidatura de izquierdas. Especialmente en Galicia, donde incluso se habló de la posibilidad de que el BNG participara en el futuro de Sumar.
Yolanda Díaz, como cabeza de lista en La Coruña, tuvo malos resultados en las últimas generales, pero ahora lideraría un movimiento de izquierdas que pretende aglutinar a formaciones como Podemos, Izquierda Unida, Más País y Compromís, entre otras.
Además, algunos de esos grupos parlamentarios tienen pésimas relaciones con la vicepresidenta segunda.
Hace años hubo iniciativas similares de partidos nacionalistas para coordinarse en el Congreso, pero con éxito relativo y efímero. Por ejemplo, lo intentaron CiU y PNV en lo que se llamó Galeuska. Y lo han mantenido sólo para presentar listas conjuntas en elecciones europeas y evitar así ser penalizados por el modelo electoral de circunscripción única.