Moncloa impuso el silencio a Irene Montero en el 'caso Melilla': "Marruecos es una cuestión sensible"

Entre el final de la reunión del Consejo y el inicio de la rueda de prensa, un alto cargo de la Moncloa hizo saber al entorno de la titular de Igualdad que Montero no debía pronunciarse sobre lo ocurrido en Melilla, porque la inmigración y Marruecos son "una cuestión sensible".

Este alto cargo de Moncloa recordó que ella puede expresarse fuera de ese entorno como considere, en función de las posiciones políticas de Unidas Podemos. Pero que la política exterior y las relaciones con Marruecos recaen bajo la responsabilidad del ministro José Manuel Albares y del propio presidente, Pedro Sánchez. Por ello, explicó, la ministra portavoz se encargaría de transmitir a los periodistas el criterio único del Gobierno respecto a la tragedia registrada en la frontera con la ciudad autónoma.

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En la Moncloa son conscientes de que cualquier crítica por parte del Gobierno español sobre la actuación de las autoridades policiales marroquíes puede desencadenar una nueva tormenta diplomática y echar por tierra el trabajo desarrollado durante los últimos meses para normalizar las relaciones con Rabat.

La ministra Irene Montero acató disciplinadamente estas instrucciones. Hasta en cinco ocasiones, los periodistas se dirigieron a la titular de Igualdad para conocer su opinión sobre la tragedia de Melilla, durante la rueda de prensa celebrada en Moncloa.

Y tal como se había pactado previamente, en todos los casos tomó la palabra la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, para responder a una pregunta que nadie le había planteado. A su lado, Irene Montero ni siquiera hizo amago de contestar y se limitó a asentir con la cabeza, con gesto serio, ante las palabras de la ministra de Política Territorial.

"Si le parece a la ministra de Igualdad, responderé a todas las cuestiones relacionadas con la valla y con lo acontecido en los últimos días", fue la fórmula utilizada por Isabel Rodríguez para arrebatar la palabra a su compañera de Consejo de Ministros.

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Ante las repetidas preguntas de los periodistas —que se quedaron sin saber lo que piensa Irene Montero sobre la polémica— la ministra portavoz expresó el pesar del Gobierno por "la pérdida de vidas humanas" y cargó toda la responsabilidad de lo ocurrido a las "mafias que trafican con seres humanos". "Esas imágenes nos conmueven a todos", recalcó Isabel Rodríguez.

Intentaba enmendar así las palabras del presidente Pedro Sánchez, quien en su comparecencia del sábado felicitó a las autoridades de Marruecos por haber frenado el asalto violento a la verja de Melilla y remató: "Está bien resuelto".

Las autoridades marroquíes reconocen la muerte de al menos 23 inmigrantes en la avalancha humana, aunque otras fuentes elevan la cifra a al menos 36.

Una vez concluida la rueda de prensa de este lunes, la ministra Irene Montero ha intentado excusar su silencio explicando, ante varios periodistas, que su partido en ningún momento ha ocultado su posición extraordinariamente crítica con lo ocurrido ante la valla de Melilla.

"Masacre en Melilla"

Aludía a las declaraciones en las que el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, se ha mostrado "horrorizado por la masacre en Melilla". Su grupo ha presentado este lunes ante el Congreso de los Diputados una proposición no de Ley, en la que exige que se realice una investigación independiente sobre lo sucedido, con el fin de "derivar las correspondientes responsabilidades políticas y penales en colaboración con las delegaciones diplomáticas de la Unión Europea presentes en Marruecos". 

Fuentes próximas a Unidas Podemos indican que no es la primera vez que Presidencia impone a Irene Montero el silencio en la sala de prensa de la Moncloa, sobre cuestiones que pueden desestabilizar el pacto de Gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos.

Así ocurrió en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado 8 de marzo, Día de la Mujer, cuando Irene Montero compareció junto a la ministra portavoz Isabel Rodríguez para presentar su Plan de Igualdad presupuestado en más de 20.000 millones de euros hasta el año 2025.

Pero todavía estaba muy reciente el estallido de la guerra de Ucrania. Varios dirigentes de Unidas Podemos ya habían mostrado su rechazo a enviar armas a aquel país para defenderse de la invasión ordenada por Vladímir Putin y habían calificado al PSOE de "partido de la guerra" por alinearse con las tesis de la OTAN.

Por ello, en aquella rueda de prensa un periodista pidió a la ministra Irene Montero que aclarara "qué partidos del arco parlamentario español serían, a su juicio, partidos de la guerra".

Como ha ocurrido este lunes, quien tomó la palabra fue la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, para defender el "envío de material ofensivo para la legítima defensa de un país agredido".

"Unidad" ante la guerra

"Hemos de tener alturas de miras, el Gobierno pone de manifiesto la unidad de España en su conjunto, desde la unidad política al ámbito internacional europeo con nuestros aliados", argumentó la ministra portavoz.

"Esa es nuestra arma", recalcó, "el arma más poderosa para combatir esta guerra de Putin, y ahora también nuestra responsabilidad en gestionar la respuesta que hemos de dar, también unidos, a las consecuencias económicas que sin duda traerá esta agresión al continente europeo".

Por último, se giró hacia la ministra de Igualdad para preguntarle: "No sé si quieres añadir alguna otra cuestión". Irene Montero rechazó tomar la palabra para contestar y la pregunta que le había plantado el periodista quedó sin respuesta: "Gracias, ministra".

De este modo, Montero aceptó guardar silencio en la sala de prensa de la Moncloa sobre el envío de armas a Ucrania -que su partido rechaza- para que la ministra portavoz pudiera reivindicar una inexistente "unidad política" del Gobierno sobre la guerra de Ucrania.