Feijóo dice que el impuesto a la banca lo pagarán los clientes: "Es un plan que va contra los españoles"

El presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, se ha mostrado convencido de que serán los ciudadanos quienes pagando el nuevo impuesto a la banca, con el que el Gobierno de Pedro Sánchez espera recaudar 3.000 millones de euros en los próximos dos años.

"Sabemos que los impuestos siempre, siempre, acaban pagándolos los ciudadanos", ha dicho Feijóo este viernes en Benidorm, tras reunirse con representantes del sector turístico junto al líder del PP de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón.

En este caso, Feijóo cree que los bancos acabarán repercutiendo el impuesto "bien en un incremento de las comisiones que cobra a los clientes, en un aumento de los tipos interés en los préstamos o una disminución de la retribución de los ahorros de los clientes".

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Todo ello, a pesar de que Unida Podemos ya ha anunciado desde el Gobierno que quiere crear un nuevo delito para meter en la cárcel a los directivos de banca o de las compañías eléctricas que repercutan el nuevo impuesto sobre los clientes.

El presidente del PP cree que el nuevo impuesto anunciado llega en un momento especialmente inoportuno, después de que el Banco Central Europeo (BCE) haya anunciado una subida de medio punto en los tipos de interés, que va a encarecer la deuda pública de España pero también las hipotecas de las familias.

"Si todo el mundo tiene que pagar más por los préstamos y le ponemos más impuestos a los préstamos, nos vamos a endeudar más y pagar más intereses", por lo que las familias tendrán menos renta disponible, ha señalado, "es una política económica en contra de los españoles".

Tras la subida de tipos de interés, ha recordado, "los países con más deuda vamos a tener muchas dificultades para devolverla. No podemos tener un país endeudado hasta las cejas".

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Al respecto, el líder del PP ha considerado que España ha sido "el país más torpe en la gestión de la situación económica desde 2019": aún está a cuatro puntos de recuperar el PIB previo a la pandemia, tiene el doble de paro y el doble de déficit público de la UE, y es el que más ha incrementado su deuda pública, un 20% del PIB.

Ante estos indicadores, ha señalado, "es evidente que nuestra política economía no funciona. Pero en vez buscar soluciones, el Gobierno busca culpables". Por ello, espera que la "herencia" que el Ejecutivo de Pedro Sánchez deje al PP "no sea el colapso de las cuentas públicas", como ocurrió con Zapatero.

Un PERTE de 12.000 millones

Tras reunirse con representantes del sector hotelero en Benidorm (Alicante), Alberto Núñez Feijóo ha dado a conocer el plan del PP para el sector turístico. 

Dentro de este plan, los populares proponen financiar con los fondos europeos Next Generation un PERTE de 12.000 millones de euros para el sector turístico, que tendrá un efecto mutiplicador en forma de creación de empleo y recaudación de impuestos.

También reclaman agilizar el control de pasaportes de los pasajeros británicos en los aeropuertos (uno de los mercados con más peso en Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias), reducir las tasas portuarias para facilitar la llegada de turistas y un Plan Renove para la rehabilitación de hoteles y alojamientos turísticos.

Del mismo modo, el PP propone potenciar el turismo rural para las zonas despobladas, ayudas a las agencias de viajes (un sector especialmente afectado por la pandemia), reactivar el turismo social y termal del Imserso e impulsar planes de turismo sector y atención al turista extranjero.

Rechaza la "tasa turística"

El PP mantiene además su petición de reducir al 5% el IVA del gas y la calefacción, y suspender temporalmente los impuestos sobre los hidrocarburos. Feijóo considera que la rebaja del IRPF que ha planteado permitirá que las familias puedan destinar una parte de su renta "al ocio y el turismo".

Por otro lado, Feijóo ha rechazado en Benidorm la nueva "tasa turística" que el Ejecutivo de Ximo Puig pretende imponer al sector, junto cuando comienza a remontar el vuelo tras dos años marcados por la pandemia.