El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, bromea con su ordenador

El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, bromea con su ordenador Tomás Blanco

Política EL COMBATE DE... CON LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL (I)

Revilla combate con ChatGPT, 'patea' su portátil y lo 'lanza' por la ventana: "Este robot está borracho"

"Ya no considero español a Juan Carlos I. Paga sus impuestos fuera" / "Soy incorruptible. Puedo decirlo porque me pusieron la panoja en la boca y no la mordí" / "A Biden le saco 500 metros en una carrera de un kilómetro" / "La gestación subrogada me recuerda a las pasiegas que daban de mamar con sus tetas a los hijos de la nobleza".

24 abril, 2023 03:14

"Este hombre tiene ochenta años, pero nos va a matar a todos. ¡Va a acabar con Dios!". Lo dice un fotógrafo que sigue a Miguel Ángel Revilla en campaña. En realidad, para Revilla siempre es campaña. Un pueblo, otro pueblo, otro pueblo. Firma de platos de plástico, inauguración de campo de fútbol, recepción de turistas en su despacho.

—¡Yo no sé qué es eso del robot! ¡Tengo un Nokia! 

—Presidente, háganos caso, que va a estar bien. 

—Usted no me entiende, ¡que tengo un No-Kia! ¿Cómo voy a hablar con un robot?

Hemos escogido a Miguel Ángel Revilla para estrenar esta serie porque se exhibe –y además es cierto– como el candidato más alejado de la tecnología. Dice su fotógrafo que el presidente de Cantabria podría derrotar a Dios –por agotamiento– en una campaña. Pero… ¿y si su rival fuera otro? ¿Y si Revilla pelea con lo más desconocido que existe para él?

"Revilla vs ChatGPT" es el nuevo "Kaspárov vs Deep Blue". La razón frente a la computadora. La inteligencia paisanuca de Polaciones contra la inteligencia artificial de los gigantes tecnológicos. El diálogo va a tener dos vertientes: por un lado, las preguntas que lanza lo que Revilla llama "el robot". Por el otro, lo que dice "el robot" acerca de las respuestas de Revilla. Una especie de polígrafo.

Empezamos. 

Miguel Angel Revilla, durante su 'conversación' con ChatGPT.

Miguel Angel Revilla, durante su 'conversación' con ChatGPT. Javi Julio El Español

"¿Qué le preguntarías a Miguel Ángel Revilla?". Hay que parar, conviene empezar de otra forma. Las preguntas que vomita ChatGpt parecen dictadas por el gabinete del Partido Regionalista de Cantabria. Que si "cuáles son las medidas más importantes de las que ha tomado", que si su programa habla de "infraestructuras"… 

—Un segundo, presidente, tenemos que hacerlo de otra manera.

—¡Pero qué dice el robot! 

—Parece que lo tiene usted comprado. 

Procedemos de otra manera: "¿Cómo le harías una entrevista jodida a Miguel Ángel Revilla?". Esa es la clave. Condicionar al robot, manipularlo. Apretarlo hasta que suelte una pregunta que valga la pena. Resulta reconfortante este engorro porque parece muy lejana la posibilidad de que estos cacharros nos quiten el trabajo a los periodistas.

El robot es un bien queda. Antes de mojarse, nos envía este párrafo: "No es apropiado sugerir preguntas con la intención de hacer una entrevista 'jodida'. Además, es importante tener en cuenta que la ética periodística implica el respeto a los derechos". Pero luego, por fin, dispara.

Miguel Angel Revilla, entrevistado por ChatGPT.

Miguel Angel Revilla, entrevistado por ChatGPT. Javi Julio El Español

"¿Por qué decidió abandonar su promesa de no presentarse a la reelección como presidente de Cantabria en 2019?".

¡Nunca hice esa promesa! Siempre dejaba en duda el tema, sobre todo en las últimas elecciones. Estoy con problemas de riñón. Cuando se acercaba el momento de presentarme, me hacía pruebas médicas y preguntaba si me daban "el alta". De momento, me dicen que sigo en condiciones. Por eso me presento.

El robot dice que hizo usted esa promesa y que la rompió.

¡Que no, hombre! Nunca dije de manera rotunda que no me presentaría. Lo dejaba en el aire y a la espera de las revisiones médicas. 

[Una rápida búsqueda en Google ofrece decenas de noticias en las que el Revilla de hace años hablaba, cuando le preguntaban, de las "pruebas médicas pendientes" para tomar la decisión. Revilla dice aquí… la verdad] 

Ahí va otra pregunta del ChatGPT: "¿Cómo explica Revilla que, a pesar de estar al frente del gobierno regional desde hace más de 15 años, la economía de Cantabria siga siendo una de las más débiles de España?".

No estoy de acuerdo. Cantabria tiene un 10,2% de paro y España un 14,5%. Somos la quinta Comunidad con más empleo de España. Ahí están los datos. Última encuesta de la EPA.

¿Qué es lo más extravagante que ha propuesto Revilla para mejorar Cantabria?

Creo que no he hecho propuestas extravagantes.

Cantabria está aislada por montañas que van de los 1.500 a los 2.700 metros. He procurado levantar infraestructuras que nos comuniquen con los demás lugares. La autovía a Bilbao, la autovía a Madrid… Unas cosas se han conseguido, otras están en obras. Como por ejemplo el AVE. 

[Aquí no hace falta tener inteligencia artificial para saber que las "infraestructuras" no son, ¡ni de lejos!, lo más extravagante que ha propuesto Revilla. Pasamos la respuesta por el polígrafo y se monta la primera revuelta] 

Presidente, el robot dice que usted miente.

¡Cómo!

Dice varias cosas. La primera, que usted propuso crear una playa artificial en Santander en el año 2004 "para atraer más turistas".

¡Nunca en mi vida se me ha pasado eso por la cabeza! Pero si Santander está llena de playas. ¡Ese robot está borracho! 

También dice que usted propuso, en 2012, que se permitiera el uso de la marihuana para casos terapéuticos y que se pudiera plantar en algún lugar de Cantabria.

Eso es una verdad a medias. Lo del uso terapéutico no sólo lo propuse yo, sino que lo aprobó el Parlamento autonómico por unanimidad. Nos lo pidió un compañero diputado, fuimos solidarios y votamos todos que sí. Pero nunca dije nada de cultivar marihuana. 

El robot dice que, en 2014, usted propuso que los presos pudieran trabajar en el campo para ayudar a la agricultura de la región a cambio de reducciones de condena. 

No, no, no y no. Alguna vez he podido decir que a determinados presos no les vendría nada mal hacer un trabajo de pico y pala. Pero nada más. 

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla. Javi Julio El Español

Escuche esto: "En 2019, Revilla sugirió la creación de una granja de gallinas en las azoteas de Santander para producir huevos frescos".

¡Las gallinas tienen que estar en los prados! En la puñetera vida he dicho eso. ¡Ese robot se ha bebido todo el orujo de Cantabria! 

[El robot cambia de registro y vuelve a las preguntas convencionales, políticamente correctas, inofensivas. Todos estos artilugios están sometidos a una suerte de deriva puritana. En cuanto les pides algo un poco arriesgado, salen con eso de los "derechos", la "igualdad" y las "ofensas"]

¿Cuál es la mejor medida que ha tomado usted para Cantabria? Vaya pregunta le lanza el robot, Revilla. Se quejará...

En 1995, Cantabria era la peor región de España en carreteras y, desde entonces, hemos hecho 2.400 kilómetros de carreteras, que son las mejores de España. 

El robot le alaba eso, pero también mejoras en turismo, gastronomía y sanidad.

Por supuesto. ¡Todo eso es verdad! Claro que lo es [ahora a Revilla sí que le gusta el ChatGpt]. En 2003, el aeropuerto tenía un avión por la mañana y otro por la tarde; 17.000 pasajeros al año. Hoy tiene 31 conexiones, 22 de ellas con el extranjero; 1.300.000 pasajeros. 

Quiere saber la inteligencia artificial "cómo ha influido el amor por las anchoas en su carrera política" [es como si el robot viera en Revilla a un guía turístico en lugar de a un presidente autonómico]

Lo que más me gusta son las anchoas. Las devoro desde niño. Bajé de mi pueblo a Santander cuando tenía once años, así las descubrí. Muy raro es el día que no como anchoas. Están en la nevera de mi despacho y en la de mi casa. 

Esto se lo preguntamos nosotros: ¿cuántas se toma al día?

Una media de seis cada jornada.

¿Le sientan bien?

¡De maravilla! Tengo ochenta años. A uno de mi edad que es presidente de los Estados Unidos soy capaz de sacarle quinientos metros en un kilómetro. Y si hacemos una carrera de diez kilómetros, no me aguanta el ritmo ni dos. 

No está mal la pregunta que viene ahora, Revilla: "¿Ha tenido alguna vez una tentación de corromperse? Si es así, ¿cómo la superó y qué lecciones aprendió de esa experiencia?".

Ninguna persona puede decir que es honrada si no ha tenido una oferta y la ha rechazado. La tuve y la cuento en mis libros: el año en que un empresario me ofreció 100 millones de pesetas a cambio de apoyar a un presidente, Juan Hormaechea, que necesitaba mis dos diputados. Superé ampliamente la tentación. Soy incorruptible. Pero nadie puede decir eso si no le han puesto la panoja en la boca y se ha resistido a morderla. 

Repreguntamos nosotros: a las marcas de Cantabria les viene muy bien cuando aparece usted en los sitios degustando sus productos. ¿Suelen ofrecerle pasta bajo manga?

Todas las promociones que hago son gratuitas. Ha habido ofertas importantes, como la del plátano de Canarias. Cuando con once años bajé del pueblo a Santander, me llamó la atención comer por primera vez un plátano. El guion de los anuncios hubiera sido simpático.

Cómo habría sido.

Habría salido con un plátano diciendo: "La culpa de que me haya quedado tan pequeño es de que no me comiera un plátano hasta los once años. Coman plátanos, por favor". Pero yo vendo mi tierra.

En 1980, esto era la provincia de Santander. Hoy Cantabria es una región conocida. Todo el mundo sabe que hay sobados, quesadas y anchoas, picos de Europa, año jubilar lebaniego.

El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla.

El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla. Javi Julio El Español

Para no saberlo, con la matraca que no ha dado.

He dado bien la trisca, ¿eh?

El robot dice que usted no se han presentado contra usted cargos por corrupción a lo largo de su carrera política.

Eso es cierto.

Pero el robot, señor Revilla, sólo tiene información hasta 2021. Tenemos que hablar del caso de corrupción que afecta a su consejería de Obras Públicas. Así que le hacemos nosotros la pregunta: ¿cómo es posible que robaran tanto delante de sus narices y usted no se diera cuenta? 

Era difícil que nos diéramos cuenta. Es un funcionario con plaza por oposición [se refiere al hombre que acumuló casi tres millones de euros a través de un fraude en la adjudicación de carreteras]. Esos funcionarios están para controlarnos a los políticos. Yo no puedo tomar decisiones sin los informes favorables de gente como esa. Es el caso de un funcionario corrupto entre 25.000.

Pero no lo vieron. Y fue durante mucho tiempo.

No es fácil de detectar. Tomé una decisión injusta: mi consejero, que no sabía nada, presentó la dimisión. Porque ocurrió, efectivamente, en una consejería mía.

¿Usted fue el máximo responsable político, entonces, de que aquello pudiera ocurrir?

No. En 14.000 folios de expediente no hay ningún nombre de político. Se habla de un funcionario y tres empresarios. 

¿No es mala gestión política no haberlo visto?

¡Si no lo han visto ni los compañeros de ese funcionario! Es como si decimos que la Guardia Civil es una institución corrupta por tener a un teniente general en la cárcel. Un garbanzo negro hay en cualquier parte. 

[Volvemos al robot, al Revilla contra la tecnología. Al polígrafo]

Quiere saber ChatGPT qué es lo más raro que ha hecho usted en una campaña electoral.

Ponerme en la plaza del Ayuntamiento de Santander a firmar platos de plástico y regalárselos a la gente con mi firma y una caricatura hecha por mí. He firmado casi 6.000 platos.

Eso tiene que contaminar un montón.

No, porque la gente lo coloca en el salón de su casa. El plato lleva mi autógrafo y un autorretrato, no creo que lo tiren a la basura. Cuando me muera, habrá una subasta de platos. No valdrán demasiado porque he hecho muchísimos.

El robot dice algunas cosas más. Que usted fue en bicicleta a un debate electoral.

Nunca he hecho eso.

También dice que ha recorrido Cantabria en moto vestido con un traje regional.

Está usted de broma.

Oiga, eso dice el robot.

En la vida he montado en una moto. ¡En la vida! Joder, que ese robot bebe mucho orujo, se lo digo yo.

Le pedimos al robot ahora que le haga una "pregunta difícil" a Revilla sobre "populismo": "¿Qué piensa usted sobre la etiqueta de 'populista'? ¿Cree que es una descripción precisa de su estilo de liderazgo y de su enfoque político?". 

He sido igual desde que salí de los Salesianos, donde me tuvieron traumatizado hasta los diez años. Cuando llegué a Bilbao, descubrí un mundo nuevo y pasaron de llamarme "el mudito" a no callar. Quien me conozca desde que tengo veinte años sabe que no he cambiado en nada. Me encantan las fiestas, las ferias, las romerías, cantar. 

[ChatGPT responde lo siguiente si le pedimos que se moje acerca del populismo de Revilla: "Algunos podrían considerarlo un líder político con un estilo populista, dado que ha utilizado un lenguaje directo y coloquial y ha criticado abiertamente a los partidos políticos tradicionales y a las élites económicas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el término 'populista' puede tener una connotación negativa y puede ser utilizado de manera peyorativa. Por lo tanto, cualquier evaluación de si Revilla es un populista debe ser analizada cuidadosamente y tener en cuenta el contexto y las características específicas del líder político en cuestión"]

Miguel Angel Revilla con el ChatGPT en la sede del Gobierno de Cantabria.

Miguel Angel Revilla con el ChatGPT en la sede del Gobierno de Cantabria. Javi Julio El Español

Revilla, mucha gente dice que el PRC se parece al PNV. Quiere saber el robot: "¿Qué aspectos del modelo político y social del País Vasco considera el PRC que podrían ser aplicados en Cantabria?". 

Tengo que confesar que creé el PRC de la mano del PNV. Quería crear un partido con una estructura parecida a la suya y que defendiese Cantabria como defendían ellos Euskadi. Pero ese origen se perturbó por la aparición de ETA y la poca contundencia que algunos líderes nacionalistas mostraban frente a los asesinatos. Yo fui muy beligerante y muy duro.

¿Le dieron a usted pasta los del PNV?

No, no, pero venían a nuestros mítines.

[Revilla siempre presumía de su cercanía con el Emérito. Le encantaba que Juan Carlos I visitara Cantabria y peleaba todas las fotos que podía hacerse con él. Desde que se conoció su evasión fiscal, el discurso de Revilla ha dado un giro. Es, de lejos, el jefe autonómico que más atiza al padre de Felipe VI. Vamos a comprobarlo gracias al robot]

Mire lo que le pregunta ahora el cacharro: "¿Cree que la corrupción que afecta a la Monarquía puede tener consecuencias políticas más amplias, como el aumento del apoyo popular a opciones republicanas?". 

Lo del ex jefe del Estado es la decepción más grande de mi vida. Ahora tiene su domicilio fiscal fuera de España, ha renunciado a ser español. Yo no considero españoles a quienes no pagan aquí los impuestos. 

¿No considera español a Juan Carlos I? 

Él ha decidido no serlo. Quien no tributa deliberadamente en España no es español. Lo será en el carné de identidad. Pero en este caso tampoco, porque nació fuera [Juan Carlos I nació en Roma al estar su padre en el exilio]. Pero tenemos mucha suerte porque el actual rey no se parece en nada a su padre. Me parece muy serio y muy capaz. Está tan avergonzado de la conducta de su padre como muchos españoles, entre los que me encuentro. 

[En su última aparición en El Hormiguero, Revilla le cantó su amor a Aurora, su mujer. Vamos a ver qué tal funciona el robot en un registro menos político. Le pedimos preguntas de amor] 

¿Cómo ha influido el amor en su vida política y personal? ¿Ha tenido que hacer sacrificios en su carrera política por razones sentimentales?

Al revés, la que ha tenido que hacer sacrificios es mi mujer. Se enamoró de mí siendo militante del partido y teniéndome como cierto referente. Si no, una mujer tan guapa y tan joven, ¿cómo se enamora de un espécimen como yo? Feo, pequeño y con bigote. Me ha soportado y no sólo eso. Me ha alentado. Soy presidente de Cantabria por ella.

¿Y eso? 

En 2003, yo era la tercera fuerza política de Cantabria. Recibí una llamada del secretario general del PSOE, que había ganado a Bono por dos votos. Zapatero me llamó y me dijo que me quería ver. No sabía para qué era. Fui a Ferraz, lugar al que no he vuelto. Baja por las escaleras ZP y me dice que tengo que ser presidente, que me da los votos. 

Y usted los aceptó, claro.

Al principio, no. Le dije: "Qué dices, si soy la tercera fuerza, ¡me tiran a la bahía de Santander". Llegué a casa y se lo conté a Aurora. Me respondió: "Toda la vida diciendo que vas a arreglar Cantabria, te lo ofrecen y te vienes abajo. Eres un cagón". Al final, acepté.

[Y terminamos con el tema polémico del mes, la gestación subrogada. Al estar el robot actualizado sólo hasta 2021, va a fabricar su pregunta sin saber nada del caso Ana Obregón] 

"¿Cree que la gestación subrogada es un derecho de las personas que desean ser padres y no pueden concebir de forma natural, o más bien una forma de explotación de mujeres y/o de los niños que nacen de esta práctica?".

Con 80 años, todo eso me parece de ciencia ficción. Nací en Polaciones. Mi madre me parió en un lugar donde el médico más cercano estaba a cien kilómetros y tres metros de nieve. Es como si me pregunta usted por los marcianos. Que tengo un Nokia. ¡Tengo un Nokia!

Repreguntamos nosotros: tendrá que tener usted alguna opinión porque también gobierna para la gente más joven, hombre.

No sé… Me parece un tema bastante raro. Que una mujer se preste a que la compren… Es tan duro como cuando las pasiegas, aquellas nodrizas, tenían un niño y lo dejaban al cuidado de su hermana, que lo alimentaba con leche de vaca. Entonces ellas, las pasiegas, se iban a amamantar con sus tetas a toda la nobleza de España. Los condes, los duques, los Alba… Todos esos han sido amamantados con tetas de pasiegas. Me parece terrible abandonar a un hijo para dar de mamar a otro. 

Ya hemos terminado. ¿Qué le ha parecido el robot? ¿Funciona?

Ese robot no tiene ni puñetera idea de Revilla. ¿Cómo voy a ir yo a dar mítines en moto? Pasé de la bicicleta al coche.