El discurso de Feijóo que deja en evidencia a María Guardiola: "Sin palabra no hay política"
La líder extremeña ha asumido públicamente que el pacto con la derecha radical supone para ella incumplir su propia palabra, a la vez que el líder del PP reivindicaba el cumplimiento de los compromisos.
30 junio, 2023 16:55"En tiempos en los que la palabra de algunos políticos no vale nada, yo reivindico la política de la palabra. Sin palabra no hay política". Así de tajante se ha mostrado el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, este viernes.
En un acto con el exministro de Cultura socialista César Antonio Molina, el dirigente gallego reivindicó una política sensata y reformista, alejada del adanismo, de "la agencia de publicidad" y "del plató de televisión".
Pero, con su discurso, indirectamente, el líder del Partido Popular ponía en un aprieto a su baronesa extremeña, María Guardiola. Porque las palabras de Feijóo coincidían con la firma en la región del pacto de gobierno entre el PP y Vox. Ese pacto que, hasta este viernes, Guardiola rechazaba. Y que hoy ha acabado firmando, asumiendo que con ello incumplía su "propia palabra".
"Reivindico la política de la palabra. Sin palabra no hay política".
— PP Comunidad de Madrid (@ppmadrid) June 30, 2023
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En la rueda de prensa posterior a la rúbrica, la líder del PP regional ha sostenido lo siguiente: "Mi palabra no es tan importante como el futuro de los extremeños".
Férrea defensora de un Gobierno monocolor y muy crítica con los postulados de la derecha radical, ha tenido que recular, desdecirse y acabar acatando y firmando un documento con 60 medidas pactadas entre ambas fuerzas y que constata ciertas concesiones por parte del Partido Popular.
La líder regional, además, había prometido que dimitiría si la dirección nacional de su partido le obligaba a dar espacio a Vox en su Ejecutivo, como ha acabado sucediendo. Esta formación controlará una consejería de nueva creación, que se desgaja de la de Agricultura. La de Gestión Forestal y Mundo Rural.
Este viernes, tras anunciarse el pacto PP-Vox, adelantado por este periódico, la dirigente extremeña ha reconocido que para ella ha sido un "paso doloroso", ya que confirma lo que ella, una y otra vez, rechazaba: la entrada de Vox en el Gobierno extremeño.
"Soy consciente de que ahora hay gente decepcionada, lo comprendo y lo asumo", ha asegurado en una rueda de prensa junto al portavoz de Vox en la región, Ángel Pelayo Gordillo. "Pero quiero poner el interés de Extremadura por encima de mi propia palabra", se ha excusado.
"No he mentido nunca, mis principios permanecen intactos", ha defendido, preguntada por sus duras críticas, hace diez días, a quienes ahora serán sus nuevos compañeros de Gobierno, a los que acusó de "tirar a la papelera la bandera LGTBI", "deshumanizar a los inmigrantes" y de "negar la violencia machista". Asuntos que, entonces, planteó como líneas rojas para compartir Ejecutivo. "No puedo dejarles entrar en el Gobierno", aseguró el pasado 20 de junio.
"Es preferible que me frustre yo a que se frustre el interés de los extremeños", ha indicado, por contra, este viernes. Hace diez días, la dirigente anunció que o Vox la hacía presidenta sin entrar en el Gobierno o estaba dispuesta a asumir una repetición electoral.
El acuerdo
El PP de Guardiola quedó segundo en las elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo. Quien las ganó, por número de votos, fue el socialista Guillermo Fernández Vara. Ahora bien, los populares estaban empatados a 28 escaños con el PSOE. Por ello, los síes de Vox eran imprescindibles para la investidura de Guardiola, que pretendía gobernar el solitario. Podemos sólo obtuvo cuatro asientos en la Asamblea de Extremadura, por lo que el bloque de la derecha sumaba uno más.
A contrarreloj, en las últimas horas, el PP consiguió cuajar un acuerdo que sacia, en parte, las posturas de Vox, que llegó a solicitar, para enfado de la líder regional, hasta tres consejerías.
Como confirmando el dicho que establece que "un buen acuerdo es aquel en el que ambas partes sienten que han perdido", las dos formaciones políticas acercaron posturas estos últimos días y este viernes han firmado el documento con las 60 medidas.
Este jueves, Feijóo había apremiado a Guardiola a buscar un acuerdo "rápido" porque volver a las urnas, a su juicio, sería "malo" para la región. Unas horas más tarde, las dos formaciones rubricaban un pacto de Gobierno, que mete a Vox en el Ejecutivo, del que la líder extremeña había renegado tanto durante las últimas semanas.