Feijóo no tira la toalla: "Seguiremos intentándolo hasta el final, el PNV ya no tiene la excusa de Vox"

La puerta se cerró de golpe y en menos de 24 horas en la dirección del Partido Popular. La estrecha vía que se abrió el domingo a mediodía, cuando Vox emitió un comunicado ofreciendo sus 33 votos al candidato Alberto Núñez Feijóo para un "Gobierno constitucional", alimentó de nuevo la posibilidad de un apoyo condicionado del PNV para hacer presidente del Gobierno al líder del PP.

Sin embargo, los populares no pierden la esperanza: "Seguiremos intentándolo hasta el final", advertía un alto dirigente popular a este diario. "Ya el PNV no tiene la excusa de Vox en el Gobierno". Además, ese movimiento de los de Santiago Abascal sí le vale a Coalición Canaria, que este lunes se convertía en el escaño 172 para la investidura de Feijóo.

En su nota pública del domingo, Vox renunciaba a entrar en el Gobierno para facilitar un Consejo de Ministros sólo del PP. La idea -acordada en el cara a cara que mantuvieron los dos líderes de la derecha el miércoles 26 de julio- era "formar un gobierno que evite que Pedro Sánchez sea investido presidente con los apoyos del prófugo de la Justicia, Carles Puigdemont, Bildu, PNV y ERC".

Y sigue siéndolo, a tenor del empeño que ponen los miembros más cercanos al líder gallego: "Un Ejecutivo en minoría de Feijóo daría mucha más estabilidad a España que uno presidido por Pedro Sánchez". Según la lógica del núcleo duro del PP, "es imposible gobernar España con una mayoría tan exigua en el Congreso, el Senado en contra, y 12 Comunidades Autónomas además de las principales capitales gobernadas por tu oposición".

"Si el Rey lo propone"

El líder gallego, apuntan fuentes de su entorno, seguirá haciendo "lo posible por ampliar sus apoyos en los próximos días" y por conseguir que el Congreso le invista presidente, "en caso de que el Rey le proponga formar Gobierno como ganador de las elecciones generales". Y teniendo en cuenta que ni ERC, ni Junts, ni Bildu prevén acudir a la ronda de contactos de Felipe VI, lo más probable es que el popular sea el designado para intentarlo de inicio. 

Este lunes, a pesar del varapalo del PNV, la sede central de Génova recibió tres pequeñas buenas noticias. El sí de los regionalistas canarios; la confirmación del apoyo incondicional del líder de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Javier Esparza; y el rechazo de plano de la Junta Electoral Central al recurso del PSOE para recontar los votos nulos de Madrid.

Con todo esto, ahora ya sí, sin duda, Pedro Sánchez necesita el voto a favor de Junts, y deberá negociar con los de Carles Puigdemont. Fuentes socialistas insisten en que no sólo "no hay una mayoría en el Congreso de los Diputados para derogar los avances puestos en marcha", sino que esto es porque en su ecuación sigue Vox, "su socio de ultraderecha, con el que cada día está más vinculado en su proyecto de recortes y retroceso".

Pero otro barón popular insiste en que "hay tiempo" para hacer cambiar de opinión a los nacionalistas vascos. "Se han quedado descolocados con lo de Vox" y que, por eso, la formación de Andoni Ortuzar ni siquiera sometió al debate de su dirección el nuevo escenario surgido de la renuncia de Abascal, el pasado domingo, a cualquier sillón de poder en un Gobierno de Feijóo.

"50 más que Sánchez"

Los populares aseguran que seguirán "intentando que el PNV" les apoye. Y, de hecho, mantendrán la vía de contacto abierta con el partido jeltzale, porque son conscientes de que todo esto puede ser una estratagema para "subir el precio" llevando el sí a la "última hora".

Esto es lo que se podía arrancar con mucho esfuerzo a dirigentes populares, dado que la orden de Génova era la de "no reaccionar". En lugar de eso, los populares querían tomarse un tiempo para analizar el nuevo giro argumental.

Aun así, tras toda una jornada de silencio, la dirección del PP acabó cediendo a la presión y emitió una nota en la que destacaba que no sólo "es el primer líder del PP que gana a la primera", sino que Feijóo ya suma 172 escaños para liderar un Gobierno en solitario, "que son 50 más que Sánchez".

El candidato a la reelección nunca podría ser presidente en solitario, destaca la formación conservadora. "Y aunque sume a los 31 diputados de los 18 partidos que conforman Sumar", resaltan, aún tendría que aliarse a "todos y cada uno de los partidos nacionalistas o independentistas de nuestro país".